El grupo islamista Al Shabab ha reivindicado el ataque de este jueves contra una Universidad de Garissa, en el este de Kenia y fronteriza con Somalia, en el que un grupo de terroristas ha matado al menos a 15 personas, herido a otras 65 y tomado como rehenes a un grupo de estudiantes y profesores, todos no musulmanes.
Una acción conjunta de las fuerzas de Defensa de Kenia y la Policía ya ha conseguido evacuar tres de las cuatro residencias universitarias, mientras que los atacantes siguen atrincherados en una de ellas con un número desconocido de rehenes, informó el Ministerio del Interior.
Uno de los portavoces de Al Shabab, Shiekh Ali Raage, ha confirmado también que en la noche del miércoles los "muyahidines tomaron a profesores y estudiantes no musulmanes" para retenerlos como rehenes y amenazó con extender la lucha a otras ciudades del país mientras dure la presencia de tropas kenianas en Somalia.
Raage también ha anunciado que Al Shabab explicará los detalles del ataque cuando éste haya finalizado, pero que el objetivo final de los milicianos que se encuentran en el recinto es acabar con todos los no musulmanes que están en su poder.
Este ataque es el más mortífero que Al Shabab ha llevado en Kenia desde que a finales del año pasado atacara un autobús y una cantera en Mandera, en el extremo nororiental del país, y matara a 64 personas, todas cristianas.
