Los trabajadores del centro penitenciario de A Lama salvaron la vida a tres reclusos el pasado 22 de febrero. Los sindicatos ACAIP-UGT, ATP, CCOO y CSIF han hecho pública este lunes la actuación, denunciando las condiciones laborales en las que se encuentran los funcionarios.
El primero de los casos se produjo en el departamento de Enfermería, donde un interno se encontraba agonizante. Los servicios médicos consiguieron mantenerlo con vida hasta que pudo ser evacuado en ambulancia.
Esa misma tarde un preso avisó de que su compañero se había caído de la litera. La actuación de los trabajadores permitió reanimar al hombre, que al parecer habría sufrido una intoxicación.
En el tercero de los casos, un preso conflictivo fue hallado en su celda con una soga anudada al cuello. Un funcionario irrumpió rápidamente en la celda y logró salvarle la vida. Tras ser reanimado, el individuo trató de agredir a quien le había auxiliado.
"Las plazas que se convocan quedan desiertas en su mayoría debido a la penosidad de las condiciones laborales"
Estas situaciones, denuncian los sindicatos, ponen de relieve un déficit de personal. Un hecho que "da lugar a que se reparta medicación psicotrópica de forma rutinaria para cuatro días a un gran número de internos, lo cual inunda los patios de medicamentos que son objeto de trapicheo y abuso".
Por último, explican desde las organizaciones, que "las plazas que se convocan quedan desiertas en su mayoría debido a la penosidad de las condiciones laborales y a unas retribuciones inferiores a las de los sistemas de salud públicos".
