CIRCULA UN rumor, uno más, que afectaría de confirmarse a la estación de Monforte. Asegura el mismo, el propósito de Adif de establecer en Vigo a los maquinistas de mercancías que hasta ahora tienen su plaza de residencia en la ciudad del Cabe. Y también sostiene la rumorología la voluntad decidida de trasladar el taller de mantenimiento de material existente en las instalaciones ferroviarias del ya desmantelado nudo ferroviario, en otros tiempos centro neurálgico del ferrocarril en Galicia.
Lo del taller viene de lejos. Hace años intervine como diputado por la provincia de Lugo en defensa de la continuidad de su ubicación en Monforte. Pretendían entonces, nunca supe por qué, trasladar el grueso del mismo a la localidad asturiana de Lugo de Llanera. Desde hace años, han sido constantes las decisiones de los responsables del ferrocarril público de desmantelar o trasladar instalaciones ubicadas en la ciudad de Lemos. Algunas pudieran tener justificación, otras no, muchas parece que obedecían al capricho o a ideas pintorescas ajenas a la necesidad desde luego, innecesarias, costosas y poco o nada justificadas por la modernización, el reajuste, la economía o la lógica, al menos la que podemos manejar las personas que carecemos de las curiosas anteojeras de los grandes gestores.
Parece que las instalaciones ferroviarias de Monforte deben entender desde hace años los gestores del tinglado que carecen de expectativas,
Por cierto, parece que las instalaciones ferroviarias de Monforte deben entender desde hace años los gestores del tinglado ferroviario público (hay que subrayar esto último) que carecen de expectativas, y por tanto sus únicas decisiones se orientan a un paulatino pero inexorable proceso de cierre o supresión en ellas, de servicios y elementos.
Hay que preguntarse a la vista de lo que ha sucedido en los últimos tiempos y de lo que se rumorea, que en este ámbito siempre se suele confirmar, y por eso es oportuna esta reflexión en alta voz, si se tiene una idea clara de las instalaciones ferroviarias necesarias para el ferrocarril actual, y acerca de la ubicación más conveniente. Me refiero a una idea clara y buena para el servicio y para los viajeros. Nada que ver por ejemplo, según apuntan las obras y los propósitos, con el costosísimo tinglado que están preparando en Vigo.
Desde luego, por otra parte, hay que plantearse dudas acerca de la voluntad de impulsar el tráfico de mercancías, decisión política urgente y siempre soslayada, al que los gestores públicos ferroviarios, definitivamente no orientan, visto el panorama, el empeño que la realidad demanda a mi juicio.
Si algún día va a haber una estación intermodal en Monforte, no tiene sentido que se movilice a los maquinistas de mercancías llevándolos a Vigo.
En el marco de la anterior reflexión habría, es pertinente, que plantearse alguna cuestión sobre el tan manoseado ‘puerto seco’ de Monforte . ¿Contemplan Renfe y Adif algo al respecto? Y si no es así, ¿por qué las entonces absurdas inversiones en la infraestructura?, ¿es que Renfe y Adif no son empresas públicas?, ¿es que nadie coordina y decide ordenadamente en estas cuestiones? Pues más bien parece que no.
Lo cierto es que si algún día va a haber una estación intermodal en Monforte, y es hora de que se tome una decisión al respecto, o que el languideciente proyecto se abandone y se explique, no tiene sentido que se movilice a los maquinistas de mercancías llevándolos a Vigo. Supongo que para que animen el superproyecto que han preparado allí.
Sería una contribución más al fortalecimiento del eje atlántico a costa del depauperado interior. Acaso apuntar solo que si bien las Administraciones públicas no tienen a su alcance por su sola voluntad y únicamente con inversión pública razonable, cambiar el signo económico de las zonas deprimidas, al menos no deben acentuar y agravar la situación de estas, y deben por contra apoyar la continuidad de las instalaciones que sea razonable que sigan donde están, sin generar mayor gasto. Deben, en fin, apostar por el equilibrio y no sumarse a las corrientes imperantes.
Si los rumores se confirmaran, Adif y Renfe harían patente que las cuestiones apuntadas no van con ellas, pero claro, resulta que son empresas públicas, para unas cosas y para otras. Supongo que se entiende.
