Roberto García: ''El ganadero perderá ayuda si no amplía superficie''

El secretario general de Unións Agrarias, Roberto García, insta a la Xunta a incentivar el «arrendamiento de tierras» ante el nuevo criterio que se aplicará para la concesión de ayudas a los ganaderos con la reforma de la Política Agraria Común (PAC). También reivindica medidas urgentes para evitar la asfixia económica del sector.

¿En qué consiste la nueva campaña de su sindicato sobre la PAC?

En 2011 desarrollamos la primera parte de esta iniciativa mediante el debate con el sector de las repercusiones de los cambios de la PAC para el periodo 2014-2.020. El nuevo ciclo informativo pretende concienciar al ciudadano de la importancia de que la Unión Europea mantenga la inversión del 40% de sus fondos de compensación a la política agraria, pese a la crisis. También denunciamos el efecto negativo de la nueva orientación de la PAC hacia los ganaderos, al vincular las ayudas a la extensión del territorio. Los agricultores suelen tener explotaciones más amplias. La escasa dimensión de las granjas lácteas es un problema en Galicia. Los ganaderos perderán parte de las ayudas europeas si no se amplían las explotaciones.

¿Qué alcance tendrá esa reducción de fondos?

Hay un gran debate, pero la ficha financiera no está aprobada. La crisis puede provocar un recorte en los cinco millones de euros que percibe España de la PAC. Esta reducción llegará en un contexto negativo para el productor de leche, agobiado por la subida del precio de las energías y de los cereales. La mitad de la renta de una explotación de vacuno de leche depende de ayudas comunitarias, porcentaje que se eleva al 60% en el caso del ganado de carne. Sin esas ayudas, los productos agrarios se encaracerían notablemente. Un kilo de carne pasaría a costar en torno a los 25 euros, un precio prohibitivo para la mayoría de los ciudadanos. También hay que valorar las ayudas agroganaderas en función de su repercusión en la gestión del territorio. Las explotaciones contribuyen al cuidado de las zonas rurales. Su coste es inferior al gasto derivado de la vigilancia y extinción de incendios.

¿Cómo se puede suavizar ese amenazante panorama?

El reparto de subvenciones por hectáreas perjudica a los ganaderos, que ahora cobran por kilo de cuota. El único factor que juega a nuestro favor es el tiempo. Tenemos de plazo hasta 2014 para aumentar la base territorial de las explotaciones. Hay que fomentar el arrendamiento de fincas y las permutas, así como facilitar el acceso a las tierras abandonadas con el fin de garantizar un criterio de igualdad en la recepción de subvenciones. De no ser así se presenta un futuro difícil ante la supresión la cuota láctea en 2015.

¿Por qué critica su sindicato la política de la Xunta frente a la sequía?

A día de hoy, no se concedió ninguna ayuda. Hay anuncios anunciando de peticiones a Madrid y Bruselas, pero no se destina ni una peseta a sufragar el problema. Se vende el placebo de que se apoya al ganadero ante incremento de los precios del forraje, pero no se actúa, pese a que los mercados de abastecimiento habitual, como Castilla-Leóno el norte de Portugal, no tienen forraje o lo venden a precios prohibitivos.

La situación se agrava por los bajos precios de la leche...

El Tribunal de Defensa de la Competencia no sirve para nada y, cuando toma alguna iniciativa, siempre lo hace en contra de los ganaderos. El coste de producción de un litro de leche aumentó cuatro céntimos al encarecerse los cereales, pero la industria plantea una bajada de cerca de dos céntimos en el precio, sin que el productor pueda repercutir sus gastos en el mercado. No hay un mecanismo de control que ponga freno a la posición de dominio de la industria y de los grandes distribuidores, al contrario de lo que sucedió en Francia, donde la agencia de control del fraude actuó contra las maniobras de Carrefour. Central Lechera Asturiana amenaza con contratos leoninos y bajadas brutales en Galicia, pese a que mantiene los precios en Asturias. Ni el Tribunal de Defensa de la Competencia, ni el gobierno gallego denuncian esta situación, que atenta contra el normal funcionamiento del mercado.

¿Qué soluciones propone Unións Agrarias en este contexto?

Los ganaderos se ven abocados a adoptar medidas de presión ante una serie de situaciones que hacen un daño irreversible a las explotaciones y provocan cierres. El lunes nos entrevistaremos con responsables de la Consellería de Medio Rural para proponer un paquete de actuaciones. Si no hay acuerdo, mantendremos el calendario de movilizaciones previstas a partir del día 13. Nuestras peticiones consisten en la aplicación de un mecanismos de aplazamiento de los créditos en vigor, la igualación del Iva compensatorio de los agricultores y de los ganaderos, que es un 1,5% más alto, y la concesión de ayudas extraordinarias ante los daños generados por la sequía.

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