Un nuevo caso de violencia en el ámbito doméstico o familiar se produjo en la madrugada de este pasado sábado al domingo en la parroquia vivariense de Celeiro. Agentes de la Policía Nacional tuvieron que detener a un varón después de que este agrediese a su madre dentro del domicilio de la mujer, quien afortunadamente no sufrió lesiones, por lo que no fue necesario que recibiese asistencia médica.
El detenido pasó la noche en los calabozos de la comisaría de Viveiro hasta que durante la mañana fue puesto a disposición del juzgado de guardia, que determinó una serie de medidas de protección para la persona más vulnerable, que en este caso es la progenitora, que consisten en el alejamiento a 50 metros de distancia.
La orden afecta tanto al hijo detenido, como a la novia de este, debido a la conducta de agresividad manifestada por ambos en algún momento hacia la mujer, lo que le provoca temor e intimidación. Al parecer, se siente indefensa, razón por la que alertó a las autoridades. El aviso ha permitido atajar una actitud reiterada de falta de respeto y agresión, que causa miedo y ansiedad a la persona afectada.
