Cerró sus puertas por orden municipal pero dejó instalado en la vía pública el cierre provisional del espacio que utilizaba como terraza. El propietario del establecimiento Chin Bar & Grill, sito en el número 54 de Camiño Real, delimitó la terraza con varios palés de madera, tapados con una lona negra, que ocupaban varias plazas de aparcamiento y que el pasado martes fueron retirados por la Policía Local.
Según explicó este miércoles el portavoz policial, los agentes de la Unidad Territorial de la Policía de Barrio, "retiraron todos los elementos para recuperar ese espacio para el resto de los usuarios de la vía", ya que, una vez clausurado el establecimiento, suponían un estorbo para viandantes y conductores.
El Concello de Lugo ordenó hace unos días la suspensión de actividad porque detectó, entre otras irregularidades, que el local disponía de reproductor de música, a pesar de que no podía tenerlo por el tipo de licencia que tienen concedida, de café-bar, y que había roto el precinto que habían colocado los agentes en el acceso al establecimiento en diciembre del pasado año. Además, los técnicos municipales detectaron una serie de deficiencias y comprobaron que el local no cumplía las exigencias básicas de seguridad en caso de incendio y accesibilidad y su propietario tampoco había presentado la acreditación de seguridad y legalidad de la instalación eléctrica y del gas del establecimiento.
La Policía Local comunicó al responsable del establecimiento la orden de cierre y el hombre recurrió la decisión municipal, pero el juzgado Contencioso-Administrativo número 1 de Lugo desestimó su recurso, por lo que el local tiene que seguir cerrado. El hostelero puede interponer ahora un recurso de apelación ante la Sala de lo Contencioso del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.
Los vecinos de la zona aplaudieron la clausura del establecimiento por parte del Concello, ya que llevan años denunciando las molestas que genera durante las horas nocturnas. Según denunciaron en multitud de ocasiones, el local –que anteriormente se llamaba Deluxe– "incumplía el horario constantemente".
A pesar de que el bar fue clausurado por el Concello, un cartel en la puerta dice: "Cerrado por vacaciones".
