Deporte Local Lugo
Saqués busca su décimo entrenador en cinco años
Un perfil repetido en la nómina del Lugo. Un tipo buscado casi en exclusiva pero que no ha acabado de cuajar para que el banquillo rojiblanco sea de hoja caduca. El club ha insistido en un cliché de entrenador que casi nunca acaba por cumplir su contrato desde la llegada de Tino Saqués a la presidencia. La lista de sustitutos de Juanfran cuenta con nombres que encajan en esa tipología de preparador.
Una buena parte de los nombres que están en la lista de los despachos del Ángel Carro para hacerse cargo del equipo –Fernando Estévez, Iván Ania o Mehdi Nafti, con quien la Radio Galega da por próximo un acuerdo cuyo principal obstáculo es desvincularse de su actual club, el Etoile Sportif du Sahel– presentan un patrón común con los entrenadores que han pasado por el estadio del Miño desde 2015: joven, sin demasiada experiencia en el fútbol profesional y con hambre de hacerse un hueco en la élite del balompié, pero que no permanece más allá de junio.
Solo dos de los entrenadores contratados por Saqués no presenta este modelo: Javi López y Luis César Sampedro –al que algunos rumores también sitúan como futurible para desempeñar el puesto de Juanfran–. El arousano, quien estuvo en la campaña 2016-2017 ya tenía una amplia experiencia en la categoría. Sin embargo, su salida del club no fue demasiado amistosa ni con los despachos ni con el vestuario, del que aún resisten en la plantilla los tres capitanes -Pita, Seoane e Iriome- junto a Marcelo Djaló.
De este perfil podrían ser otros futuribles como Anquela o Natxo González, tal y como publica Dani Baniela en el Diario As.
Sin embargo, ocho de los diez técnicos de la era Saqués eran casi novatos en la categoría de plata. El primero de ellos, Luis Milla, había entrenado únicamente en las categorías inferiores de la selección española. En Las Rozas había ganado un Europeo sub-21 en 2011 y dirigido la selección olímpica en Londres 2012. Firmó por el Lugo en el verano de 2015, de donde se marchó en febrero de 2016. Su sustituto fue José Durán, un hombre de la casa sin ninguna experiencia en el fútbol profesional.
La campaña siguiente el técnico fue Luis César Sampedro, quien se marchó en junio sin renovar su contrato. Su reemplazo fue Francisco Rodríguez. El almeriense se había hecho cargo del equipo de su ciudad en Primera División temporada y media y 25 encuentros en Segunda con el Ucam Murcia, con el que descendió. Llegó al Lugo tras ganar la terna con Planagumá y Curro Torres. Se marchó a pesar de tener un año más.
Las dos siguientes campañas, el Lugo optó por mantener el modelo. Solo Javi López fue la nota discordante ya que había dirigido a siete equipos en la categoría de plata, aunque llevaba tres años sin entrenar antes de aterrizar en el Ángel Carro.
Con el cese de López llegó un nuevo novato: Alberto Monteagudo, quien debutó en Segunda con el Lugo tras nueve años en Segunda B. No terminó la temporada tras una trayectoria irregular de juego y resultados. Su sustituto en el banquillo fue un Eloy Jiménez que parecía una fotocopia de su predecesor en cuanto a experiencia. Seis años en la categoría de bronce antes de iniciarse en el fútbol profesional.
Jiménez salvó al equipo y comenzó la siguiente temporada, pero fue cesado en diciembre. Su relevo lo tomó Curro Torres. El catalán se había formado en la cantera del Valencia en Segunda B y trabajó en el Lorca y el Córdoba en Segunda, aunque no completó su contrato. En el Lugo tampoco lo hizo y fue sustituido por un Juanfran que nunca había sido entrenador jefe en la élite.
