La asociación Peludiños buscará residencia para los once animales que actualmente están en la perrera municipal de Vilalba antes de dejarla, tal y como confirmaron desde la directiva.
La entidad, que hasta ahora se encargaba del cuidado de los animales y las instalaciones, anunció este viernes que cesaría su actividad "ante la falta de apoyo institucional" y este sábado el Concello publicó un comunicado para defender que hay un convenio de colaboración de 15.000 euros "no que a asociación se comprometía á limpeza do canil, ao coidado dos animais, á recollida de animais e á xestión da adopción dos mesmos" y que en este momento había negociaciones abiertas "para realizar algunha mellora, contemplando un incremento da subvención". Pero las posturas están totalmente distanciadas.
"Pedíamos que contratasen a alguien, esa era nuestra prioridad, y es lo que nos llevan prometiendo meses, pero nunca llega una solución —en este momento un trabajador municipal iba dos horas por la mañana—. También hay que hacer arreglos en las instalaciones", explican desde la directiva de la asociación mientras recuerdan que están "desbordadas" por un trabajo en el que asumen competencias que dependen directamente del Concello.
"Despois de insistir e insistir ante o Concello para que se fixese cargo da súa responsabilidade e de deixar claro que nós somos un mero ente de axuda, pedíusenos un mes para solucionalo, xa pasaron cinco e seguimos igual", explicaron en un escrito publicado el viernes, lamentando que pese a las múltiples reuniones, "nada se cumpre".
Tras el comunicado de Peludiños, el Concello de Vilalba publicó otro al día siguiente para "aclarar" la situación. Y en él, el gobierno local, que "agradece o labor feito", defiende que había negociaciones abiertas y que fueron rotas "vía redes sociales", algo que el colectivo niega de forma rotunda.
"Ao chegar o novo equipo non existía convenio de colaboración, polo que se mantiveron encontros coas persoas encargadas de Peludiños para chegar á firma deste acordo, así como buscar alternativas de mellora á situación da canceira municipal, con multitude de eivas que se levan arrastrando moitos anos e que impiden o seu correcto funcionamento", explican desde el Concello, mientras lamentan "a falta de entendemento" y anuncian que estudiarán otras vías de colaboración para encontrar una solución.
Peludiños se formalizó en 2016 con el objetivo de cuidar perros abandonados y fomentar la adopción de animales en Vilalba, aunque sus voluntarios ya realizaban este tipo de labores con anterioridad. Tras la muerte de Carmen Pereira hace unos meses, quien dedicó casi una década al cuidado de los animales, casi todo el trabajo recayó en las tres voluntarias que forman la directiva de Peludiños en la actualidad.
Estas explican que ahora centrarán sus esfuerzos y el dinero que tiene la entidad en encontrar residencias y casas de acogida para los animales. "Lo que no queremos es irnos y dejarlos tirados, a partir de ahí se tendrá que encargar el Concello", dicen.
