El funeral de Aretha Franklin estuvo plagado de intensos y emotivos momentos, sin embargo también hubo una gran nota negativa en el acto.
Un pastor, que estaba en la palestra con Ariana Grande, comenzó a intentar tocarle el pecho derecho a la artista.
El hombre fue insistente en su acción a pesar de la incomodidad de Ariana Grande. Un caso de más que evidencia la sociedad en la que vivimos.