Un particular tapia con cemento tres de los seis pozos peligrosos de Abella

Las otras tres arquetas están tapadas con una valla y una piedra y un profundo socavón está acordonado

Tres de las seis arquetas fueron tapadas este miércoles con cemento. VICTORIA RODRÍGUEZ (pozos, Lugo)
photo_camera Tres de las seis arquetas fueron tapadas este miércoles con cemento. VICTORIA RODRÍGUEZ

El dueño de una finca anexa a los terrenos que ocupaba el antiguo matadero Abella, que cerró sus puertas hace más de tres décadas, echó este miércoles mano del cemento para tapiar tres de los seis pozos que generaron la preocupación de los vecinos de Lamas de Prado y Aquilino Iglesia Alvariño que suelen utilizar esta gran parcela privada para pasear sus perros o aparcar sus vehículos. También suele ser utilizada como zona de juegos por niños.

Este particular decidió taponar por si acaso tres de las arquetas, según explicó, porque una de ellas puede estar en el límite de su finca y las otras dos están próximas. Las otras tres ya se encuentran en terrenos del antiguo matadero, que fueron propiedad de un constructor y, tras su quiebra, pasaron a manos de una entidad financiera.

Estos pozos tienen una boca de unos 60 centímetros de diámetro y una profundidad de un metro y medio. Su utilidad era para el saneamiento. Se construyeron hace aproximadamente una década cuando se iba a urbanizar la zona y abrir una calle entre Lamas de Prado y la Avenida Abuín, sita en la fachada trasera del centro comercial Abella.

Las otras tres arquetas fueron tapadas el pasado lunes con una valla y un gran piedra cada una por operarios municipales, que además acordonaron un profundo socavón que está pegado al muro de la viviendas de Aquilino Iglesia Alvariño.

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