Falleció el domingo en Lugo, a los 77 años, Fernando Reguera Varela, hostelero jubilado. Durante varios años regentó en la calle Nicomedes Pastor Díaz la parrillada Botafumeiro, un local que tuvo mucho éxito y en el que Fernando Reguera siempre destacó por su amabilidad y buen trato, al igual que su mujer, Pilar Nadela, y sus hijos Fernando y Pili, que lo ayudaron durante aquellos años y que ahora ejercen como veterinario y profesora en el colegio Franciscanos, respectivamente.
Fernando, que también regentó otro establecimiento en la lucense Rúa das Hortas, donde se servía un excelente churrasco, era además un gran aficionado a la caza y su repentino fallecimiento causó una gran tristeza entre quienes lo conocían.
El funeral por su alma tendrá lugar el martes, a las cuatro de la tarde, en la iglesia parroquial de San Xoán de Barredo, en Francelos (Castroverde), en cuyo cementerio descansarán sus restos.