Numerosos destrozos en coches por culpa del pésimo estado de la N-120

Un enorme bache en Quiroga acapara la mayoría de las críticas. La grúa tuvo que auxiliar a unos diez conductores

Bache de la Nacional 120 en Quiroga. EP
photo_camera Bache de la Nacional 120 en Quiroga. EP

 El mal estado de la carretera N-120 suscita cada vez más quejas entre los conductores que la utilizan a diario. En los últimos días, el mayor número de críticas lo ha acaparado el punto kilométrico 502.800, justo en la entrada al municipio de Quiroga. En este tramo, un bache de impresionantes proporciones ha provocado reventones de ruedas y estropicios en numerosos vehículos.

Según ha podido saber este diario, la grúa auxilió a unos diez coches que en las jornadas recientes tuvieron percances debido al gran tamaño del socavón. Ante las quejas, muchas de ellas realizadas a través de las redes sociales, la única medida preventiva realizada al cierre de esta edición fue colocar un cono naranja justo al lado.

Esta medida se considera irrisoria entre los usuarios de la N-120, que piden actuaciones para arreglar una carretera que recibe cada día un importante volumen de tráfico. Los denunciantes destacan que han sido varios los coches que han sufrido reventones en las dos ruedas derechas, tanto la delantera como la trasera, por culpa de este bache en cuestión, aunque su situación no es la única que genera malestar.

La N-120 es famosa por su punto fatídico de Abrence, en A Pobra do Brollón, donde los accidentes son muy frecuentes. Cuando llueve, este tramo de la carretera se convierte en una pista de patinaje y las salidas de vía son una constante. Uno de los incidentes más recientes ocurrió a comienzos de noviembre, cuando un camión de transporte de fruta terminó en una cuneta.

El alcalde de A Pobra do Brollón, José Luis Maceda Vilariño, recordó hace poco en una entrevista concedida a este diario que el Ministerio de Fomento aplicó una capa antideslizante para reducir el impresionante número de siniestros, pero advirtió de que la N-120 aún carece de un estado óptimo de conservación en otros puntos de la comarca.

Algunos de los usuarios tiraron incluso de ironía para criticar el estado en el que se encuentra la carretera y recordaron los nuevos límites de velocidad. "No seáis alarmistas, que ya pusieron las señales de 90", dijo uno.

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