La Asociación de Voluntarios de Oncología Infantil (Avoi) de Málaga escuchó en múltiples ocasiones a los familiares de los niños y niñas ingresados en el Hospital Materno Infantil de esta ciudad expresar su deseo de hacer el Camino de Santiago en cuanto fuese posible. Ese sueño acaba de cumplirse y estos días un grupo de 205 personas peregrina hacia Compostela, partiendo desde Sarria, en una experiencia que supone todo "un reto" para ellas.
La comitiva está formada por 86 menores, de los cuales 60 son o fueron en algún momento pacientes oncológicos en este hospital. Les acompañan familiares, un equipo médico integrado por 13 profesionales, 25 voluntarios de la asociación y el chef Sergio Garrido, que les prepara con otros cocineros unas comidas "fantásticas".
Quien así se expresa es Juan Carmona, presidente de Avoi, un colectivo con 26 años de trayectoria, formado por 170 voluntarios que, cada día, acuden al Hospital Materno Infantil de Málaga para hacer actividades con los menores ingresados. Intentan "que estén lo más a gusto posible y que sigan siendo niños", explica.
El pasado año Avoi organizó una serie de actividades benéficas para conseguir fondos de cara a esta peregrinación, cuya infraestructura no resulta nada sencilla, dado el gran número de participantes y sus necesidades especiales. Varios niños se desplazan en silla de ruedas, dos de los peregrinos solo tienen dos años y otra menor precisa oxígeno pero, ante todo, "quiere hacer el Camino".
"La fuerza que tienen nos está dejando impresionados", asegura Juan Carmona, quien destaca "los paisajes de ensueño de los que están disfrutando y la convivencia en el Camino que les ha convertido en una gran familia".
Salieron de Málaga en Ave hasta Madrid y, desde allí, cuatro autobuses les trasladaron a Sarria, donde comenzaron a caminar el domingo. En la villa, contaron con la ayuda del presidente de la Asociación de Amigos do Camiño na Comarca, Jorge López, que les buscó alojamiento en albergues. A él se muestran agradecidos, al igual que a la colaboración que reciben por parte de los Concellos por los que pasan. "Nos están tratando de lujo en Galicia", afirma.
Al final de cada etapa disfrutan de sesiones de magia y otras actividades organizadas por los propios voluntarios de Avoi. Esta gran aventura finalizará el sábado con su llegada a Santiago, donde, tal y como dice Carmona, "ojalá los reciban con muchos aplausos".
