Las milicias kurdas del YPG están estudiando la repatriación de Samuel Prada León, el ourensano de 24 años que falleció el pasado día 10 cuando combatía la ofensiva del ejército turco en el frente de Afrin, en el norte de Siria. Está previsto que junto a él retorne a su país de origen el cuerpo de otro europeo abatido en el campo de batalla.
Prada, apodado con el nombre de Baran Galicia, es el primer español que muere en el conflicto de los cerca de 25 que se sumaron a las filas kurdas en los últimos meses. El joven se había alistado en verano para repeler el avance del Estado Islámico (Isis, por sus siglas en inglés), pero la precaria situación de la población civil de Siria e Irak hizo que cambiara de parecer y decidiera luchar por defenderla.
