El pasado lunes una peregrina madrileña de 53 años que hacía el Camino con un grupo de 17 personas se presentó en el PAC de Palas manifestando que tenía fiebre y malestar desde hacía dos días. Desde ahí, la mujer fue trasladada al Hula para hacerse una PCR, para la que se le tomó la muestra al mediodía. Aunque debía permanecer aislada, cuando se le comunicó el resultado positivo, algo que se hizo por la noche, la mujer se encontraba ya en Arzúa, donde se cree que tiene una casa familiar en la que ahora debe acabar la cuarentena.
Allí se le hará también el estudio de contactos, por lo que es muy probable que el grupo con el que seguía la ruta jacobea tenga que confinarse.