La idea bastante generalizada de que son los jóvenes quienes pierden más vidas en el asfalto cae por su propio peso cuando se analizan las estadísticas recabadas por la DGT en la provincia de Lugo. Y es que, muy al contrario, son los conductores mayores de 65 años los que encabezan las tasas de mortalidad en las carreteras lucenses.
Tal y como explican desde la jefatura provincial de Tráfico, el 36% de los conductores fallecidos en el último año superaba esa edad. Este porcentaje sitúa a los mayores de 65 como el grupo con más muertos en accidentes de tráfico, seguido de los menores de 35 años, con una tasa del 21%.
El tercer grupo con mayor índice de mortalidad es el que va de los 45 a los 54 años de edad -con un 18%-, mientras que los conductores de 35 a 44 y los de 55 a 64 presentan tasas de fallecimiento similares, de entorno al 12%.
Ante estas cifras, Tráfico reconoce que la tasa de mortalidad entre los conductores lucenses que superan los 65 años es «elevada», y más si se tiene en cuenta que no son ni mucho menos el tramo con mayor número de licencias o permisos, sino que representan únicamente el 19 por ciento del censo total de conductores.
Lugo gana 5.456 conductores en tres años
La provincia lucense ganó 5.456 conductores en los últimos tres años. Tal y como revelan los datos facilitados por la Jefatura de Tráfico de Lugo, el censo de conductores a finales de 2010 ascendía a 216.607, mientras que actualmente hay registrados 222.063 titulares de algún permiso de conducción.
