La lluvia recluyó en Viveiro el vía crucis de hombres en la iglesia de San Francisco

El vía crucis tuvo lugar en la iglesia de San Francisco. JASÉ Mª ÁLVEZ
photo_camera El vía crucis tuvo lugar en la iglesia de San Francisco. JASÉ Mª ÁLVEZ

La lluvia recluyó este miércoles en la iglesia de San Francisco y sus claustros el vía crucis de hombres de Viveiro organizado por la hermandad de Las Siete Palabras y la parroquia de Santiago. El acto, que encabeza la Cruz guía, cedida por la Venerable Orden Tercera, estuvo presidido por el Cristo de la Agonía y representa la Pasión de Jesús con rezos y reflexiones en las catorce escenas correspondientes que sufrió de camino al monte Gólgota.

Este vía crucis es una tradición propia de la Semana Santa vivariense, declarada de Interés Turístico Internacional, puesto que lo normal en el resto de España es que se hagan itinerarios mixtos, pero en la ciudad del Landro cada uno se reserva una jornada.

El recorrido suele partir de la iglesia de San Francisco y recorrer las calles acompañado por filas de cofrades que acompañan con cantos a modo de rezo las estaciones, siempre que esto es posible; ayer la lluvia impidió la salida.

La austeridad marca el vía crucis masculino, acompañado por cantos entre las estaciones, que tuvieron que realizar en el interior de la iglesia y en los claustros de San Francisco. El sacerdote y un lector -colaboradores habituales y de otras cofradía, así como de agrupaciones religiosas de Viveiro- repasaron una a una las catorce escenas.

Catorce penitentes anónimos con el hábito oscuro cargaron cruces acompañando los rezos como penitencia por las promesas hechas. «Algún leva moitos anos ofrecido e incorpóranse outros a medida que quedan prazas vacantes», explica Jesús Fernández, directivo de Las Siete Palabras, hermandad que no pudo sacar a la calle el Cristo de la Agonía (José Rivas, 1946), imagen que forma parte del paso El Calvario.

BURELA. Por otra parte, la iglesia parroquial de Burela acogió por la tarde otro vía crucis singular, en el que procesionan los pasos del Santo Cristo y la virgen de la Soledad, que ayer tampoco pudieron salir para cubrir el trayecto hasta la iglesia de Vila do Medio,

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