Natxo Lezkano, entrenador del Cafés Candelas Breogán, ha afirmado este jueves que la mano de Velimir Perasovic en el Kirolbet Baskonia, su próximo rival, "empezará a notarse desde ahora".
"Ya era un equipo súper sólido, en la liga estaba arrasando, aunque ha tenido dos derrotas quizá un poco inesperadas por los rivales, pero en el resto ha ganado de veinte, treinta o cuarenta. Es un equipo de primer nivel de Europa que en liga está muy bien y en la Euroliga, una competición tremenda, lo está pasando peor", comentó en rueda de prensa.
AUDIO Coach Lezkano en sala de prensa. O Club segue traballando no mercado para pechar unha incoporación https://t.co/5tzeaab9Hc pic.twitter.com/yKCimPJ6fw
— Cafés Candelas Breogán (@CBBreogan) 6 de decembro de 2018
Para él será un partido especial, ya que regresa a Vitoria y se enfrentará a un equipo al que dirigió junto a Perasovic la década pasada y también como técnico principal mientras el actual entrenador del Baskonia se recuperaba de una angina de pecho.
Lezkano: "Es mi casa, pero no voy a ir allí para saludar a la gente, sino para ganar"
"Es mi casa, le tengo mucho cariño al club, siempre me han tratado fantástico y el público también. Es un partido que me hace ilusión", declaró.
Lezkano reconoció la superioridad del Baskonia, pero advirtió de que su equipo no renunciará a lograr en Vitoria su primer triunfo a domicilio esta temporada. "Somos un equipo inferior, pero tenemos nuestras opciones y hay que buscarlas. No voy a ir allí para saludar a la gente sino para ganar", apuntó.
Sin embargo, no contará todavía con el sustituto de Tarence Kinsey ya que, como admitió, su búsqueda no está siendo fácil por las limitaciones presupuestarias.
"Quitando Uriz y Norel, el equipo está al completo, lo cual nos está posibilitando entrenar con más ritmo y situaciones de juego, por fin, y lo vamos a notar", indicó el preparador vasco del conjunto gallego.