La fachada de la sede lucense de la Federación de Caza fue atacada con pintura y en la pared del bar situado justo apareció un grafiti con la frase: "Se tocan a unha tocan a todas, cazadores asasinos".
El suceso se produce tras el incidente en Castro de Rei en el que un cazador hizo un disparo ante la presencia de animalistas.
La tensión entre partidarios de la caza y adversarios se ha intensificado en las últimas semanas en toda Galicia. Los campeonatos de caza de zorro o la polémica por la presencia de jabalíes en la ciudad de Lugo son algunas de las cuestiones de fricción entre ambos posicionamientos.
DENUNCIA. La Federación Gallega de Caza en Lugo denunciará ante el Cuerpo Nacional de Policía los últimos “actos vandálicos” que ha sufrido su sede en la ciudad, según informó a Efe su presidente, Francisco López, quien lamenta esta nueva agresión por parte de quienes se oponen a la actividad cinegética.
La fachada donde está ubicado el rótulo de la sede de la Federación Gallega de Caza en Lugo apareció manchada con pintura de color rojo, después de un fin de semana en el que se produjeron algunos altercados entre cazadores y activistas en contra de la actividad cinegética.
“Esta misma mañana voy a presentar denuncia en Comisaría”, explicó López, y “ya lo hizo el propietario del inmueble”, porque “no se puede dejar pasar que a uno le echen pintura en su casa”.
“Ya sabemos de dónde vienen los tiros”, insistió el presidente de la Federación, porque los colectivos que se oponen a la práctica de la caza “están ahí” y se hacen visibles con sus acciones. “Respetamos sus ideas”, dijo López, pero nunca que esa oposición a la caza se manifieste a través de este tipo de acciones.
