La Xunta, al Concello: "No puede ponernos deberes si no ha hecho los suyos"

El delegado territorial de la Xunta de Galicia en Lugo, José Manuel Balseiro, aseguró este jueves que la administración local de Lugo no está en posición de poner "deberes" a la autonómica cuando aún no hizo los suyos.

De este modo salió al paso de las críticas que el miércoles vertió el gobierno local de la capital lucense a raíz del supuesto retraso en la firma de los convenios para ejecutar la construcción del Centro Integral de Saúde de la ciudad y para equipar el nuevo auditorio.

En cuanto al nuevo auditorio, el Ayuntamiento de Lugo y la Xunta de Galicia llegaron a un acuerdo para que sea la administración autonómica la que se ocupe de su equipamiento a cambio de una exención en el pago del Ibi de los edificios del Sergas, pero Balseiro recuerda que la postura municipal tendría que expresarse "a través de un acuerdo plenario o, cuanto menos, de la junta de gobierno". "Hasta donde yo sé, ese acuerdo no se ha tomado", dijo Balseiro.

En cuanto al Centro Integral de Saúde, que la Xunta de Galicia construirá en el edificio del antiguo Hospital Materno-Infantil, dentro del complejo del viejo Xeral, Balseiro precisó que "hay que medir los tiempos". Recordó que el convenio de colaboración entre ambas administraciones ya fue remitido al Ayuntamiento de Lugo, pero "dos departamentos" municipales, en concreto "Urbanismo y la Secretaría", no se ponen de acuerdo a la hora de darle el visto bueno.

En todo caso, dijo no comprender "la prisa" que le ha entrado al gobierno local por este asunto, habida cuenta de que la Xunta de Galicia aún acaba de licitar el contrato para la redacción del proyecto y para obtener la licencia de obra hay que contar primero con esa documentación.

Balseiro le pidió al gobierno local que aclare "qué discrepancias tiene el Ayuntamiento" en relación con estos proyectos y que explique a la ciudadanía si le ha realizado "algún requerimiento a la Xunta" en relación con estas actuaciones, porque "lo demás es hablar por hablar".
A su juicio, no deja de ser una reacción política, porque "las grandes inversiones en la ciudad vienen de la mano de la Xunta de Galicia y del Gobierno de España".