As Catedrais es por decisión de los votantes en un concurso de internet una de las siete maravillas naturales de España. ¿Qué valor se le da a esta elección? El conocimiento amplio de este entorno costero de A Mariña, el interés que suscita o su capacidad para atraer visitantes. No es poco. Es un recurso natural turístico de primera magnitud en la costa lucense. Como tal hay que conservarlo. La masificación de las visitas como la que se registró en la Semana Santa pasada pide medidas para que no entre en riesgo este conjunto. Pide servicios. Y pide también que este reclamo turístico que ya funciona se aproveche para que los visitantes que se acercan a la playa de As Catedrais se detengan en A Mariña lucense, visiten y conozcan otras localidades de esa costa que atrae por sí misma. La promoción publicitaria de As Catedrais ha de ser más que una imagen bonita insertada en el conjunto de los reclamos de Galicia. Hay que enmarcarla, situarla, con otros atractivos paisajísticos, gastronómicos y culturales que tiene el conjunto de A Mariña. As Catedrais es un valor a rentabilizar por toda A Mariña.
Dimitir lanzando vasos
La orquesta París de Noia pertenece al patrimonio festivo de los gallegos. Lo sabe todo aquel que constata la satisfactoria identificación del país con esos anuncios de «Vivamos como galegos». Las noticias de agencia no dan las razones que llevaron al presidente de Nuevas Generaciones de Ribeira a paralizar la actuación de la orquesta París de Noia el pasado fin de semana con un método tan drástico como el de arrojarles vasos y una botella. Después de hacerse el silencio en la verbena, el joven debió de reflexionar y presentó su dimisión. A lo mejor pretendía que la dimisión fuese sonada. Parece que lo consiguió.
