Galicia en clave económica, que fue presentada este lunes, es una publicación coral que recoge el análisis sobre los retos que afronta la comunidad autónoma, que realizaron 36 expertos en las jornadas que se celebraron de norte a sur de la geografía lucense (Ribadeo, Lugo, Chantada...) durante un año y medio. Ese foro estuvo organizado por Economía Digital, en colaboración con la Diputación de Lugo y el diario El Progreso. Su coordinador, Julián Rodríguez (A Coruña, 1968), advierte de que a Galicia le "va a costar más" salir de la crisis.
¿Qué diagnóstico se hace en esta obra de la situación de la comunidad gallega?
Galicia tiene un enorme potencial en determinados sectores productivos, que no son bien aprovechados. Son como las piezas de un puzzle que no están ensambladas todavía, que es la conclusión que yo extraigo de estos casi dos años de trabajo. Hay debilidades, amenazas, fortalezas y, sobre todo, oportunidades. Eso salió a relucir durante las ponencias. Por ejemplo, el experto que contaba los problemas del sector lácteo al mismo tiempo destacaba que nos encontramos entre las diez regiones más productoras de la Unión Europea y que eso había que ponerlo en valor.
¿Cuáles son esas luces y sombras de Galicia?
Entre las potencialidades están el sector agroalimentario, el forestal, los productos del mar, el textil... Las previsiones que tienen organismos internacionales apuntan a que va a crecer la demanda de alimentos exponencialmente. Yo no me quedaría con el naval ni con la automoción, que está muy concentrada, como sectores de futuro de la economía gallega. Deberíamos aprovechar el posicionamiento en infraestructuras portuarias. Galicia es nudo en varios ejes del transporte de mercancías marítimo por el mundo. El 80% se mueve en contenedores -salió reflejado en las jornadas-. Sin embargo, el nuevo puerto que se está haciendo en Galicia no es apto para contenedores. Hay un problema de planificación. Eso también emergió en las jornadas en relación a la demografía: ¿Fomentar la natalidad, que es una política a largo plazo, o intentar retener el talento que se va de aquí o captar mano de obra inmigrante, a corto o medio plazo?
"El dato del Producto Interior Bruto del primer trimestre de este año va a ser malo en Galicia y el de España fue del 0,9%"
Unos sostienen que Galicia crece y otros que está estancada, ¿cuál es la realidad?
Según el Producto Interior Bruto (PIB), que es un indicador de indicadores, España creció el año pasado un 1,4% y Galicia solo el 0,4% -el sector industrial cayó un 2,2%-. Frente a la media española es cierto que vamos peor. Tardaremos más en salir de la crisis, porque también tardamos más en entrar. Ese plus de resistencia del que hablaba el bipartito no fue tal porque se difirió el impacto de la crisis en los indicadores principales. La salida de la crisis nos va a costar más. Estamos a la espera del dato del PIB del primer trimestre de este año. Salió el de España, que fue del 0,9%, y el de Galicia va a ser malo.
¿Cómo se puede entender entonces que la mejora de los datos macroeconómicos reflejen una situación que el ciudadano no ve reflejado en su día a día?
El mensaje en España de que estamos saliendo de la crisis y se está creando empleo no llega al ciudadano. En Galicia ese mensaje no se puede transmitir porque no estamos creciendo, tal vez esté a las puertas de lo que puede ser el inicio de la recuperación, pero todavía le falta mucho. En España hay que tener en cuenta que el 94% de los contratos que se hacen son a tiempo parcial. Falta un modelo. Se analiza todo desde el punto de vista cuantitativo, pero no cualitativo. El Gobierno dice que se crearon 400.000 empleos el año pasado, pero no cómo fueron. Y fueron en el sector servicios y en la construcción, donde es temporalidad pura y dura, y no en la industria. El País Vasco tiene una tasa de paro 10 puntos por debajo de Galicia y de la media española porque tiene un sector industrial muy potente. Este año se crearán otros 600.000. Se está saliendo de la crisis, pero de otra manera. Pensábamos que íbamos a volver a la alegría anterior, pero es con mucha desigualdad. Junto con Letonia, España es el país de la zona euro en dónde han aumentado más las desigualdades en los últimos años.
