LAS ARMAS despiertan temor en el mundo occidental, donde su tenencia y utilización están muy restringidas y donde se miran de soslayo. En áreas rurales, los rifles o escopetas sí se asumen con más familiaridad por la práctica de la caza, pero aún así, España es uno de los países más restrictivos en cuanto a los permisos armamentísticos. La complejidad en la materia obligó a crear, en 1986, en la Guardia Civil, la especialidad de Intervención de Armas y Explosivos y en Burela, desde hace 14 años, está al frente de este departamento el cabo primero, de la localidad asturiana de Tineo, Jesús Martín Flórez.
A sus 55 años, ¿siempre ha sido esta la especialidad a la que ha querido dedicarse?
Me gustan las armas por mi trabajo y practico el tiro deportivo. Desde la salida de la Academia de Guardias de Baeza, en Jaén, mis anteriores destinos fueron el puesto de la Guardia Civil de Cangas del Narcea en Asturias, en Servicio Rural. Posteriormente, fui destinado a la Intervención de Armas y Explosivos de la misma localidad, en noviembre de 1996. Fue en ese año cuando había realizado el segundo curso especial en la materia. Y desde mayo de 2004, tras solicitar el traslado, pasé a hacerme cargo de la Intervención de Armas y Explosivos en Burela.
¿Cómo están organizados?
Nuestra misión viene recogida en una Orden General que desarrolla la Reorganización de la Intervención de Armas y Explosivos. Las Intervenciones de Compañía Territorial, como es mi caso, salvo raras excepciones, están compuestas por un suboficial o cabo primero o cabo, además de dos guardias civiles; todos titulados en armas y explosivos. Constituye el escalón más próximo al ciudadano.
¿Cuáles son sus cometidos?
Los cometidos que realizamos serían, entre otros, tramitar las solicitudes de licencias y autorizaciones de armas; controlar la vigencia de las licencias; comprobar el funcionamiento de los establecimientos de la demarcación cuya actividad esté regulada en la normativa y materializar las inspecciones encomendadas en el Plan Anual de Inspecciones a los establecimientos de armas, explosivos y artículos pirotécnicos.
"Se solicitaron unos 600 permisos de primera vez de renovación; 23 de ellos para armas cortas"
¿En qué consisten los trámites de tipo más administrativo?
En efecto, hay una labor centrada en ejercer el control administrativo de las armas, mediante la expedición, archivo y registro de las guías de pertenencia y circulación, así como la de cumplimentar las revistas y la expedición de los certificados de inutilización del armamento. También hay que custodiar las armas depositadas en Intervención y remitir las propuestas de subasta o reducción de chatarra a la Intervención de Armas de la Comandancia de Lugo.
¿Qué detenciones ha habido?
Las detenciones más destacadas fueron en el año 2005; tres mariñanos acusados de fabricación de explosivos para uso en canteras. Entre los años 2014 y 2016 se procedió también a la detención de tres mariñanos, acusados de un supuesto delito de tenencia ilícita de armas. Se les intervinieron tres armas largas y una corta.
¿Cuáles son las infracciones más frecuentes?
La más frecuente es la tenencia de un arma de fuego sin tener la autorización administrativa. Y el hecho de estar en posesión de una licencia y no presentar el certificado psicotécnico correspondiente para su actualización por motivos de edad o de deficiencia física.
¿Y cuántos se han revocado, por la pérdida de facultades o por edad?
Hubo aproximadamente cuatro revocaciones de licencias y tres, por pérdida de facultades. La Subdelegación del Gobierno se encarga de imponer sanciones por caducidad del permiso. La infracción leve suele ser de 300 euros.
¿Qué tipo de armamento vigilan?
Las intervenciones de armas controlan, administrativa y físicamente, todas aquellas que recoge el artículo 3 del Reglamento de Armas: armas cortas, como pistolas y revólveres; carabinas de calibre 22; escopetas, rifles, armas blancas y hasta carabinas de aire comprimido, entre otras. Debemos efectuar controles de transporte y consumo de explosivos, como en la ejecución de obras civiles —autovías o carreteras, minas, canteras...—. También nos ocupamos del control de espectáculos pirotécnicos en cuanto a medidas de seguridad, así como del control de la venta de artículos de este tipo.
¿Qué requisitos hay que cumplir para poder tener un arma?
Los trámites para que cualquier ciudadano español o residente en España, mayor de edad, pueda solicitar la expedición de la licencia para la adquisición, tenencia y uso de armas —pongamos por ejemplo las más comunes que son escopetas y rifles—, pasan por que el peticionario aporte una fotocopia de la licencia de caza o de la licencia federativa para tiro deportivo —tiro al plato o tiro de precisión que normalmente se practica en galería de tiro—, es decir, dependerá de la actividad a la que desee uno dedicarse. También necesitaría presentar un certificado psicotécnico, expedido por el centro de la provincia donde resida; una fotocopia del DNI y abonar unas tasas. Si se trata de la primera solicitud, tendría que examinarse para la obtención de la licencia. En el caso de Lugo, habría que realizar las pruebas en la Comandancia de Lugo o en la de A Coruña en meses alternos.
¿Cuántas solicitudes para tenencia de armas se registran en la comarca de A Mariña lucense cada año?
Alrededor de 600, entre expediciones para tenerlas por primera vez y las renovaciones de licencia de armas. Para armas cortas, se han registrado unas 23, para dedicarse a la práctica del tiro deportivo.
Viendo lo que sucede en Estados Unidos donde muchos ciudadanos defienden el uso de las armas y donde se puede comprar una, ¿cree que España llegará algún día a ser similar en ese aspecto?
Cada país tiene su legislación para la legalización de armas y fija o establece la normativa para la adquisición de las mismas. España es uno de los países mas restrictivos para la compra de armas.
¿Hasta qué punto puede un ciudadano que tiene una licencia de armas defenderse por ejemplo de un intruso en su propia casa?
Hay sentencias del Tribunal Supremo que valoran el uso de arma en defensa propia, como en los siguientes casos: en situaciones de necesidad racional de usar el arma; cuando el asaltante tenga actitud de atacarte; que sean varios los asaltantes o que te intimiden con un arma. Y es en estos casos donde la Guardia Civil debe detallar pormenorizadamente todas las circunstancias porque debe estar muy razonado.
