Jesús Lence, propietario de Leche Río, anuncia que si hay otro incidente con sus camiones suspenderá la recogida de leche de inmediato. Afirma que no admitirá chantajes y que no se puede culpar a la industria de un problema global.
El propietario de la principal firma láctea de Galicia considera que la crisis del sector no es sólo un problema gallego, "sino del resto de Europa y se enmarca en una coyuntura mundial. En España, Francia y otros países cayó el precio de la materia prima ante el exceso de oferta". Jesús Lence subraya que "es muy difícil" exportar ese excedente de producción de la Unión Europea a terceros países "porque el euro está muy caro en relación con el dólar".
Pregunta: ¿No influyen las marcas blancas en la caída de precios?
Respuesta: El problema es que hay más leche que la que se consume, ya sea de marca blanca o de empresa. Los precios se ajustan a los mercados y el que produzca y venda más barato tiene más posibilidades de sobrevivir.
P: Los productores se quejan de la importación masiva de leche. ¿Por qué llega tanta materia prima de Francia?
R: Nos movemos en un mercado comunitario, por lo que no se puede hablar de importación. Francia vende leche a España, del mismo modo que nosotros a ellos o Polonia a Alemania.
P: ¿Qué deben hacer los ganaderos gallegos para garantizar la rentabilidad de sus explotaciones?
R: Están obligados a abaratar costes. En Francia alimentan el ganado a base de forraje y aquí, si queremos subsistir, tenemos que hacer lo mismo y con un gasto similar para ser competitivos con los productores franceses y portugueses.
P: ¿Ve posible una próxima recuperación de los precios?
R: La cotización en Europa baja hasta el mes de junio y empieza a subir en julio. La producción en Francia cae en verano y si disminuye la oferta es posible que se produzca un aumento del precio que alivie la situación de los ganaderos.
P: ¿Qué papel puede jugar la Administación en este proceso?
R: Los políticos sabrán lo que deben hacer, pero el verdadero problema es de mercado. Hay que ser competitivo y la receta vale tanto para la ganadería como para la industria o el comercio.
P: ¿Le sorprendió el anuncio de cierre de Leche Pascual en Outeiro de Rei?
R: Si Leche Pascual pone un precio a su producto y el consumidor no compra, no tiene otro remedio que reducir su producción o cerrar. Lo mismo nos puede pasar en Leite Río si no somos competitivos. Si pagásemos al productor los precios que demanda el Sindicato Labrego Galego no aguantaríamos abiertos ni dos meses. Le aconsejaría a sus sindicalistas que fueran a vender la leche al mercado, para que sepan lo que hay que hacer, antes de decirnos a qué precio tenemos que pagarla.
P: ¿Está normalizada ya la recogida de leche por parte de su empresa?
R: Hoy [por este martes] no me comunicaron ninguna anomalía, pero ya estamos vacunados. En cuanto surja un nuevo incidente paramos el reparto al instante. No esperaremos al día siguiente. No vamos a aceptar ningún chantaje, ni podemos obligar a trabajar a 40 camioneros bajo esa presión. A ningún profesional le gusta que lo paren y le vacíen la cisterna. Si no nos dejan ejercer libremente la profesión, no recogeremos.
P: ¿Ve posible la creación de un grupo lácteo gallego?
R: Ese grupo ya existía con Ram y Leyma y se lo vendieron a Puleva. Con el dinero que cobraron que hagan otro, pero los políticos no pueden pedir a nadie que se lo sirva en bandeja.
