Lugo-Spórting: hermanos desde 2015

Las aficiones volverán a vivir una fiesta en el Ángel Carro. Ambas mantienen una buena relación desde el gol de Caballero que llevó a los asturianos a Primera
Aficionados del Spórting, en la Praza Maior de Lugo. XESÚS PONTE
photo_camera Aficionados del Spórting, en la Praza Maior de Lugo.

Un partido cómodo en el Ángel Carro, donde las aficiones estarán hermanadas en la grada, con los mismos colores pero con distintos escudos en las camisetas. El estadio del Miño vivirá un duelo que siempre es especial por el desplazamiento de la Mareona y que lo es aún más desde la jornada 42ª de la temporada 2014-2015, en la que los dos clubes quedaron unidos para siempre por un doble enfrentamiento histórico.

Antes de aquel 7 de junio de 2015 los Lugo-Spórting ya habían sido importantes en cuanto al ambiente vivido en el campo lucense. En el primer duelo entre ambos -en la campaña 2012-2013- se juntaron 4.800 seguidores en el Ángel Carro. El siguiente curso fueron 6.000 aficionados para pasar a 6.600 en la citada 2014-2015. Hubo que esperar hasta la 2017-2018 para volver a vivir otro Lugo-Spórting, con 6.498 espectadores juntos en el estadio. La pasada campaña fueron 5.515 para arrojar una media de 5.882 seguidores al lado del Miño.

"Son dos aficiones que se llevan muy bien. Recuerdo que cuando yo llegué aquí fueron todo mensajes de ánimo y de apoyo, sobre todo por parte de la gente del Spórting, porque sabían que venía a un gran club, además de que las dos gradas se quieren. Estoy contento por ello y esperemos que sea una buena fiesta, un buen partido y que gane el Lugo", declara el lateral izquierdo Roberto Canella, canterano del Spórting y actual futbolista del Lugo.

Pero si algo une a las dos aficiones fueron los dos partidos que permitieron el ascenso del conjunto asturiano a Primera División en la campaña 2014-2015. Los dos encuentros tuvieron lugar en la última jornada de la temporada: el Betis-Spórting y el Girona-Lugo.

A aquella jornada 42 el cuadro gijonés llegaba como tercero, por detrás del campeón matemático, el Betis, y del Girona, que tenía a dos puntos y con el golaverage a favor. Por lo tanto, el Spórting necesitaba ganar en el Benito Villamarín y que el Lugo puntuase en Montilivi.

El Spórting encarriló pronto su partido con un gol de Guerrero en el minuto 24 para ponerse 0-1. Al filo del descanso vieron cómo Fran Sandaza hacía el 1-0 para el Girona y aplazaba el ascenso. Los asturianos solucionaron su resultado en la segunda mitad con tantos de Jony e Isma López, pero necesitaban que el Lugo igualase el tanto gerundense.

Con el encuentro en el último minuto, un córner botado por Toni Dovale lo remató Pablo Caballero al fondo de la red, lo que le daba el ascenso al Spórting.

Roberto Canella considera que aquel tanto del argentino permitió afianzar las buenas relaciones entre las dos aficiones. "Pasé muchos nervios, sobre todo los dos minutos posteriores al gol de Caballero porque el Girona apretaba y era complicado, pero luego fue todo muy bien", dijo el lateral asturiano.

"Hay un vídeo por internet que lo viven en el campo todos mirando unos para otros con las manos en la cabeza. El vídeo demuestra cómo lo vivieron. Hay que estar ahí para saber lo que significa eso. Fue muy importante para ellos", relata el carrilero rojiblanco.

Este domingo (18.00 horas) lucenses y asturianos volverán a unir sus colores y a celebrar juntos en un partido en el que cada uno tirará para lo suyo, pero siempre deseando que al rival le vaya bien cuando acabe la jornada. Se espera un buen número de seguidores sportinguistas, que poblarán toda la grada de General y parte de Preferencia.

Más en Deporte Local Lugo
Comentarios