El 9 de marzo el alemán Jens Lieber salió de su ciudad, Hannover, en un tractor clásico con el objetivo de recorrer el Camino hasta Fisterra. Pocos días después de su partida estalló la crisis sanitaria del Covid-19, pillándole el cierre de fronteras en Francia. De esta forma, una peregrinación que tenía previsto que durara unas semanas se prolonga ya cuatro meses.
Así lo explica el alemán desde el Museo Vivo e Integrado do Campo e da Locomoción Agraria (Muvicla), de Trasliste (Láncara), donde este martes realizó una parada para conocer las instalaciones puestas en marcha por Marcos Vázquez.
Jens Lieber lleva ya más de 2.000 kilómetros y 106 horas sobre su Hanomag R45, un tractor de 66 años. El vehículo porta una caravana, lo que le facilita pernoctar en cualquier lugar durante su travesía. La idea era completar la ruta jacobea con otros cuatro amigos en tractores y pasar también por Italia, aunque finalmente recorre él solo el itinerario.
Su viaje comenzó en Hannover y sobre su Hanomag, a "poco más de 40 kilómetros por hora", cruza media Europa, explica Jens Lieber, quien cuenta con la empresa de neumáticos Maxam como patrocinador. La pandemia estalló en plena peregrinación y pocos días después de arrancar quedó atrapado en Châteauneuf-en-Thymerais, una población francesa cercana a Chartres. Allí estuvo en casa de unos amigos. "Pensé que serían dos o tres semanas y llevaba dos camisetas, dos pares de calzado, dos pantalones... y al final fueron tres meses allí", relata este alemán, que posee una empresa de bombas de inyección.
Una vez abiertas las fronteras continuó su viaje, que lo llevó el martes hasta Láncara para visitar el museo. En su peregrinación también conoció otras colecciones similares, señala este miembro del club Langenpfunzen de Rosenheim.
Jens Lieber tiene previsto llegar este miércoles a Compostela. Luego seguirá a Fisterra, donde abrirá una cerveza alemana que tiene reservada para celebrar la finalización de la ruta en tractor, cuenta entre risas. Sin embargo, su aventura no acabará ahí, pues prevé regresar al museo de Trasliste para dejar su tractor y recorrer el Camino Francés a pie desde Pedrafita do Cebreiro.
Una vez completada la ruta, volverá a subirse a su tractor para continuar hasta Toledo, donde quiere hacer un curso en una escuela de herreros. Sus siguientes destinos son Córdoba, el cabo de San Vicente, Sevilla o Granada, asegura. Desde allí atravesará España para seguir por Francia e Italia con destino Hannover. A su ciudad espera llegar a finales de septiembre. "Tengo tiempo, vendí mi casa, no tengo presión", afirma mientras recorre kilómetros y kilómetros sobre un clásico.
