Los gimnasios calientan para ponerse a tono durante mayo

Las salas ya se están dotando de medios para controlar la temperatura o el acceso
Los nuevos equipos del gimnasio. EP
photo_camera Un aficionado hace ejercicio en un gimnasio antes de la alerta sanitaria. EP

El plan presentado por el Gobierno para el desescalonamiento por fases ha puesto a calentar al sector del deporte amateur, centrado en los gimnasios, con el horizonte puesto en la apertura total en junio pero con la vista puesta ya en el 11 de mayo. En esa fecha, muchos lucenses podrán volver ya a sus salas de fitness habituales, aunque con muchas limitaciones.

En todo caso, dependerá mucho de qué tipo de gimnasio sea, de su clientela y tamaño y de la inversión que estén dispuestos a hacer sus propietarios. Por ejemplo, José Antonio Durán, de Abfitness, trabaja con la vista puesta en ese 11 de mayo, pero porque él ya tenía muchos pasos avanzados hacia un cambio de modelo de gestión que ahora le va a permitir cumplir mejor con esos requisitos de la primera fase: cita previa, no uso de vestuarios, servicio individualizado, poco personal...

“Voy a acelerar la implantación de una app de entrenamiento virtual y otra de gestión individualizada sin contacto”, explica Durán, “y tengo que realizar una gran inversión para el control de accesos, las máquinas para la toma de temperatura, los dispensadores de hidrogel o los pulverizadores para el desinfectante”. Al final, explica, debido a las estrictas limitaciones de aforo en esas primeras fases, podrá servir a pocos de sus clientes, “pero se trata de dar el servicio”.

La misma idea guía a Leovigildo Real, solo que el complejo deportivo D10 que dirige da servicio a muchos más clientes y su necesidad de abrir es aún mayor: “Aunque sea perdiendo dinero, hay que abrir porque lo va a hacer la competencia”. Se han marcado como meta finales de mayo, con una preocupación principal, “que la gente no vuelva por el miedo al contagio”. Para evitarlo, están instalando en cada sala máquinas que desinfectan con ozono, hidrogeles, alfombras especiales... todo lo que pueda generar confianza.

El 11 de mayo es también la meta que se ha fijado el Fluvial para reabrir sus instalaciones deportivas, “con cita previa y respetando distancias”, según explica el presidente, Tito Valledor. Calcula que en los primeros días podrán dar servicio a unos 40 socios por hora, ya que pondrán máquinas de cardio en las de fitnees y en sala de juntas. También tienen previsto instalar cámaras térmicas en los accesos.

Antes se abrirán las instalaciones exteriores para federados de piragüismo y tenis, y creen que para el 8 de junio todos los socios podrán bajar al club, aunque distribuyéndose por días.