Opinión

Ganar para el idioma

 

La campaña de Política Lingúística para visualizar entre los jóvenes la normalidad del idioma gallego y esta entrada en el mes de mayo, con la celebración de las Letras Galegas, permite una mínima reflexión sobre las vías para la normalización del idioma gallego en el uso social, sin agresividad y sin imposición. Es obvio que nunca tantos medios contribuyeron al uso del gallego pero es una evidencia también que su uso pierde terreno como primera lengua habitual en las familias o las relaciones sociales, sobre todo en la juventud. Si esto es así, algo falla o algo habrá que hacer diferente. Las fórmulas de imposición y confrontación han generado el efecto contrario al deseado, si es que realmente se pretendía con ello fomentar el uso del idioma. La politización y su buscada, por algunos, monopolización por el nacionalismo, como un bien exclusivo, es y ha sido un mal favor para la causa del idioma propio. El idioma es de todos y se ha de visualizar públicamente como de todos sin que se convierta en argumento arrojadizo frente a nadie. No se trata de ningún buenismo; se trata de ganar a la juventud, a los hijos de quienes hablan gallego, desde la razón y el corazón para el uso normalizado de la lengua propia. Y que no sea una asignatura que genera problemas a un alumno, que no sea percibido por nadie como un indicador de posiciones políticas. Hay que ganar para el uso del gallego por ser un patrimonio de esta comunidad, que no cuesta esfuerzo mayor sostenerlo y reforzarlo; por ser una realidad que puede convivir perfectamente con el uso y el dominio de la otra lengua oficial, el castellano, a la que sería suicida renunciar, y las autoridades y los políticos en general han de lograr un imaginario lingüístico y cultural en el que el gallego y sus expresiones culturales sean entendidas como tan españoals como si se formulan en castellano. Lo contrario es fomentar secesionismo.

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