Las medidas anunciadas por la Xunta para reducir y alejar la población de jabalí del entorno de la ciudad se han visto frenadas por la solicitud por parte de la Fiscalía de un informe que justifique y explique las acciones previstas. La institución judicial reclamó este documento a la Xunta a raíz de la denuncia realizada por varios colectivos animalistas.
El último plan anunciado por la Xunta para luchar contra el jabalí pasaba por la instalación de jaulas para capturar los animales, que luego serían sacrificados. Posteriormente, y si esta medida no diera resultado, se consideraría la posibilidad de realizar una cacería nocturna con arco.
A finales de febrero, la Plataforma pola Convivencia Ética coa Fauna Salvaxe, junto a Anonymous For The Voiceless y Lugo Animal Save, solicitó a la Fiscalía que parara la caza de los jabalíes. Estos colectivos consideran que la caza y la captura para sacrificio en un entorno urbano son medidas excepcionales que tienen que estar muy justificadas y consideran que esto no sucede.
Los opositores apuntaban la necesidad de un informe técnico riguroso y advertían de que quien autorizara el plan de eliminación del jabalí sin ese documento podría incurrir en un delito de prevaricación.
La Xunta prepara ese documento en este momento, pero la demora en la ejecución del plan podría complicarla, ya que las hembras ya han empezado a parir. La presencia de estos animales salvajes en terrenos y huertas de la ciudad sigue preocupando.
