Tras ocho años como presidente del PP de Sarria, Fernando Carlos Rodríguez dejará el cargo el 12 de julio, fecha de celebración de un congreso al que optarán como mínimo dos candidatos. Sin decantarse por ninguno, no oculta un "desencanto" con la marcha del partido y ve necesario "darle vida", como declara en la entrevista que publica el diario El Progreso en la edición impresa de este jueves 12.
¿A qué se debe su decisión de no presentarse a la reelección?
Está tomada desde el pacto entre PP e Inga, en el que una de las condiciones era no participar en las municipales, ni Arturo Corral ni yo, y celebrar un congreso pasados los comicios para posibilitar que la gente de Inga participe en los órganos del partido. Acepté no concurrir a las municipales y es lógico que, si decido no participar, tomen otros el relevo. Desde ese momento, dejo de participar activamente en la vida del partido y hoy soy el presidente teórico, porque es el grupo municipal, con José Antonio García a la cabeza, quien lleva la responsabilidad.
¿Se sintió forzado de algún modo a tomar esa determinación?
Fue voluntaria. Soy de los primeros afiliados y creo que está fuera de toda duda que soy un hombre de partido que siempre ha buscado, por encima del interés personal, el del PP. También está mi actividad profesional. Entré en la política sarriana tras el cambio de actividad de Rubián a Sarria y hoy es el caso contrario. Mi labor aquí tenía y debía de tocar a su fin.
Tras el anuncio de Fernando Díaz Copa se espera la confirmación de José Antonio García, con lo que habrá, como mínimo, dos candidatos a ser su sucesor. ¿Cómo lo valora?
Es bueno que pase lo que acaba de anunciarse, es saludable democráticamente. El partido después de las municipales estuvo adormecido; entró en una fase de marasmo. Estamos convencidos de que era posible ganar y quizás no hicimos las cosas correctamente. Quizás no acertamos en la inclusión y exclusión de algunos nombres. Mi renuncia fue a lo mejor en balde y eso me duele, porque se perdió una gran oportunidad. El resultado de las generales fue malo y para muchos frustrante. Es necesario un revulsivo.
Copa dijo que se estaba perdiendo la ilusión; ¿Comparte su opinión?
Personalmente soy una de las personas desencantadas con la marcha que está llevando el partido. Lo lógico es hacer el congreso cuanto antes para darle nuevo aire y vida que, honradamente, creo que le hace falta.
¿Es partidario de unificar en una misma persona el papel de presidente y portavoz municipal?
Yo fue presidente y portavoz, normalmente pasa eso. Es una eterna discusión, uno nunca sabe..., depende de las personas.
¿Ha firmado el aval para alguno de los candidatos?
No, lo normal como presidente es que espere. La recogida oficial de avales se inició el martes y todo lo recogido anteriormente no sería legal. El aval no significa apoyo a un candidato sino darle la posiblidad de presentarse si reúne un mínimo de 145. El día del congreso, la votación será en urna.
Hay quien cree que está usted detrás de la presentación de Copa.
De mí se tienen dicho tantas cosas y tantas maledicencias... Otra cosa es que tenga mis simpatías y preferencias. Para algunos meterse conmigo se ha convertido en un deporte, pero es su problema.
Entonces, ¿no es cierto?
Para nada. Otra cosa es que crea que no están haciendo bien las cosas en el PP.
¿Qué balance hace de su etapa el frente del PP de Sarria?
Extraordinariamente positivo; un logro que no es mío sino de todos los ediles que me acompañaron y del comité ejecutivo. Se amplió el ‘Gregorio Fernández’ y se implantó el ciclo superior de mantenimiento de equipos industriales, se remodeló la Rúa Maior, se hizo la primera fase de la autovía, la carretera a Becerreá, el sellado del vertedero, el saneamiento rural, el servicio de limpieza, la adjudicación del agua... Ahora la marginación a la que el PSOE está sometiendo a Sarria es brutal y quizás no hayamos sido capaces de llegar a la gente con esta denuncia.
¿Le queda la espina de la alcaldía?
Cuando participas en una contienda electoral se puede ganar o perder. Procuro quedarme con lo bueno. En el recuerdo están los logros y la satisfacción de haber trabajado con honestidad y rigor.
¿Cuál será su actividad política?
Militante de base. Ayudaré en Sarria y Bóveda en todo lo que pueda y me pidan, pero mi carrera política termina. Hasta la jubilación me dedicaré a la farmacia.
