Corría el año 1820 cuando nació la primera feria de Sarria y lo hizo de la mano de Fernando VII. El monarca concedió al Ayuntamiento el mercado del día 20 de cada mes y desde entonces continúa celebrándose.
Esta fue la primera feria mensual de la localidad de Sarria, a las que se irían sumando después las del día 6 -creada en el año 1890- y las del 27 -fundada en 1946-, explica Xaime Félix López Arias, investigador y miembro del Seminario de Estudos Sarriaos Francisco Vázquez Saco.
La primera feria fue otorgada a través de una real orden de Fernando VII y se conserva una comunicación del gobierno civil de la época, con fecha del 7 de septiembre de 1820, en el que se da cuenta de esta concesión.
En esta nota se indica que el secretario de estado y de despacho de la península informa de que "o rei en atención ás razóns expostas pola vila de Sarria, sita na provincia de Lugo, e oída a Deputación Provincial, serviuse permitir que, sen exención de dereitos, se celebre mercado na dita vila o 20 de cada mes", apunta el investigador. Esta real orden es comunicada al gobierno político del distrito de Lugo para "intelixenza e noticia do Concello da citada vila de Sarria".
Según relata López Arias, en la villa también había un mercado semanal dedicado a la compra y venta de productos alimentarios, no de ganado
MERCADO FRANCO. Sin embargo, antes de 1820 existía en Sarria la feria franca, antecedente del actual San Isidro, pues en 1487 los Reyes Católicos le concedieron a la localidad la celebración de una feria anual.
Según relata López Arias, en la villa también había un mercado semanal dedicado a la compra y venta de productos alimentarios, no de ganado. En sus inicios tuvo lugar en la Fortaleza, de ahí que una de las torres fuera conocida como la del mercado. Después se trasladaría junto a la iglesia de Santa Mariña.
En otras localidades de la zona se contabilizaban la conocida como feria de Paradela, que era en Vilamaior, y la del Mercado da Serra, en Barbadelo. Entonces este último núcleo formaba parte del municipio de Samos, no de Sarria, como ocurre hoy en día. Además, existía la feria del Lázaro, aunque pertenecía a la parroquia de Maside, aclara el investigador sarriano.
