El economista de la salud Enrique Costas Lombardía, nacido en Mondoñedo, falleció en la madrugada del pasado sábado en Madrid, a consecuencia de las complicaciones tras una fractura de cadera.
Costas Lombardía fue el vicepresidente de la comisión de expertos del llamado Informe Abril, un documento que el Gobierno de Felipe González encargó a un grupo de expertos con el objeto de mejorar la eficiencia de la sanidad pública. Las recomendaciones propuestas levantaron una gran polémica y fueron posteriormente olvidadas. Sin embargo muchas de ellas acabaron aplicándose con el tiempo y siguen formando parte de iniciativas de distintos expertos, año tras año.
El mindoniense fue también muy apreciado por sus artículos, aportaciones críticas a la gestión de la sanidad. En sus últimos años, centró gran parte de ellos en la gestión del sistema de trasplantes, en los que criticaba que se insistiera públicamente en ese presunto liderazgo de España en las donaciones. Recordaba que la recopilación de datos en España incluía todos los órganos extraídos, fueran después implantados o no, y que si se dejaban de cuantificar los que acababan desechándose, en realidad España no era el país más donante. Otro de sus temas recurrentes de sus últimas intervenciones se refería a la liberalización de las oficinas de farmacia y a cómo la degradación del sistema público se traduce en un incremento de seguros privados.
