Fallece el obispo emérito de Lugo, José Gómez

Fray José Gómez
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El obispo emérito de Lugo, Fray José Gómez (Lalín, 1932), falleció esta madrugada en torno a las tres y media en el Policlínico Lucense S.A (Polusa), donde se encontraba ingresado desde el pasado día 27 diciembre, a causa de un empeoramiento de la grave enfermedad que venía padeciendo desde hace casi dos años.

Fray José Gómez, que cumplió 75 años en abril de 2007, fue durante 27 obispo de la Diócesis de Lugo, hasta que presentó su renuncia ante el papa y fue sucedido por Alfonso Carrasco Rouco, el pasado 30 de noviembre. Desde ese momento, pasó a ocupar el puesto de administrador apostólico de la diócesis.

El prelado vivió en estos dos últimos años altos y bajos en su enfermedad, un cáncer que le fue diagnosticado en el 2006 y por el que fue sometido a dos interverciones quirúrgicas, una primera de colon y una segunda hepática, de la que ya no pudo recuperarse.

Capilla ardiente en el Palacio Episcopal
La capilla ardiente quedará instalada a partir de las 16.00 horas de hoy en el Palacio Episcopal de Lugo, y el entierro tendrá lugar, por voluntad expresa del fallecido, en la capilla de San Froilán de la Catedral de Lugo. El día y la hora del sepelio lo tendrá que decidir el Consejo de Consultores de la Diócesis, ya que en nuevo obispo aún no ha sido consagrado y la muerte de Fray José Gómez ha dejado a la sede religiosa sin su máxima autoridad.

El alcalde de la capital lucense, el socialista José López Orozco, afirmó que el actual administrador apostólico y obispo durante 27 años, Fray José Gómez, “ha dejado una huella imborrable en la Diócesis de Lugo y en esta ciudad, con independencia de las creencias de cada uno”.

Un obispo que “supo servir y sufrir”
En las últimas semanas, Fray José Gómez fue objeto de dos importantes homenajes por parte de la sociedad lucense. El pasado 17 de diciembre, el prelado recibió el título de Hijo Adoptivo de Lugo de manos de Orozco. En esa ceremonia, su penúltima aparición pública, el prelado expresó su deseo de ser recordado como un obispo que “supo servir y sufrir”.

El día 22 de diciembre, los habitantes de su ciudad adoptiva le rindieron un homenaje popular, sin convocatorias oficiales, y se congregaron ante la sede del Palacio Episcopal para leer un manifiesto e interpretar varias piezas musicales. Aunque no se esperaba, Fray José Gómez salió a la ventana del Palacio Episcopal para agradecer esas muestras de cariño y desear una Feliz Navidad a todos los presentes.

Natural de Lalín (Pontevedra), el prelado también le dará nombre a una calle de su localidad natal, por iniciativa del actual regidor, el popular José Crespo.

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