Las redes sociales se han inundado en las últimas semanas de todo tipo de remedios caseros y no caseros para evitar el contagio del coronavirus. Los bulos han encontrado un caldo de cultivo ideal y aprovechan el temor generalizado para campar a sus anchas y confundir a una sociedad que necesita, más que nunca, instrucciones sencillas, directas y contrastadas.
La realidad es que ante una amenaza desconocida, como en este caso es el coronavirus, a veces las soluciones más seguras están al alcance de nuestras manos. La Organización Mundial de la Salud incluye entre sus recomendaciones fundamentales mantener la distancia entre personas, evitar aglomeraciones y lavarse las manos con frecuencia, además de evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca. ¿La razón? Las manos son el vehículo perfecto para la transmisión de este y de cualquier virus.
“Sabemos fehacientemente que uno de los medios de transmisión de este virus, y de otros microorganismos similares, es la inhalación por gotículas que se expulsan al hablar, al toser o al estornudar”, apunta el jefe de servicio de Medicina Preventiva del Hula, Carlos Quintas. “ Y como no tenemos la confirmación de que la transmisión se hace por vía aerógena, la solución es lavarse las manos, que son un medio de vehiculización, para evitar trasladar el virus a los ojos, la nariz o la boca. Las manos son las que lo vehiculizan todo, por eso es fundamental tenerlas limpias”, asegura Quintas.
Gran parte de los virus —y también el coronavirus—poseen una membrana exterior formada por una bicapa lipídica que es relativamente impermeable al agua. Por ello, el uso añadido del jabón permite disolver esta membrana y anular la capacidad de sus proteínas externas de engancharse a las células del ser vivo que infecta.
Carlos Quintas: "Lavarse las manos con agua y jabón es la parte intrínseca y fundamental de cualquier principio de aislamiento"
Por su composición química es un producto más efectivo que otros geles desinfectantes creados a base de alcohol, porque estos no disuelven tan bien la estructura exterior del virus.
El responsable de prevención del hospital de Lugo explica que la utilización del frotado en el gesto del lavado de manos “permite que no se fije ningún microorganismo. El mecanismo de arrastre a la flotación es lo que hace del jabón un producto tan importante o más que la solución hidroalcohólica”.
Quintas, que además de trabajar en el Hula es profesor de las asignaturas Salud Pública y Prevención de Riesgos Laborales en la USC, explica que el jabón “es la protección estándar más extensa, y así se lo trasladamos a todos nuestros compañeros en el hospital, especialmente en estas semanas”.
MASCARILLAS. Otra de las noticias que ha recorrido las redes en estas semanas es la necesidad de una mascarilla para el día a día. En opinión de Carlos Quintas, se trata de un error que proporciona una sensación de falsa seguridad a quien la lleva.
“Ojalá esto sirva de recordatorio educativo, porque cada 5 de mayo celebramos el día de la higiene de manos a nivel mundial”
“No la recomiendo porque solo sirve a la persona que está infectada, de dentro a fuera, para que no contagie”, explica Quintas. “A la gente le proporciona una sensación de falsa seguridad, y además cometen muchos errores. El otro día vi a dos personas en el vestíbulo del hospital con la mascarilla en la frente, como si fueran unas gafas de sol. Y luego está el que la toca y después se frota los ojos o la nariz. Con unas manos bien lavadas, todo esto se soluciona sin darle muchas más vueltas”.
Quintas recomienda un frotado de 25 segundos, “entrelazando mucho las manos, como vemos ahora tanto en la televisión. Eso es lo que hay que hacer, lo que tenemos que hacer todos de forma total, toda la población, y más los que trabajamos en el sector sanitario. Es la parte intrínseca y fundamental de cualquier principio de aislamiento”, sentencia este especialista.
SUPERFICIES. El Ministerio de Sanidad publicó este martes la guía ‘Medidas higiénicas para la prevención de contagios del Covid-19’, en la que recomienda utilizar agua y jabón para limpiar las superficies que más se tocan antes de desinfectarlas, ya que así se eliminan los gérmenes y la suciedad.
“Ojalá esto sirva de recordatorio educativo, porque cada 5 de mayo celebramos el día de la higiene de manos a nivel mundial”, concluye Carlos Quintas.
