Opinión

España diferente

EN PORTUGAL, los políticos alcanzan pactos de legislatura o acuerdos puntuales, lo que aquí no fue posible, y pregunté a un colega portugués, buen conocedor de la realidad política y social españolas, qué diferencias políticas ve él entre Portugal y España para que eso ocurra.

Con el primer café empezó calificando la situación española como compleja y desgranó una serie de hechos y datos que conforman un análisis comparado entre los dos países.

"En Portugal, decía, tenemos una identidad nacional fuerte, se respetan las singularidades, pero nadie habla de "nación de naciones", todos somos portugueses y todos los partidos respetan la Constitución, al jefe del Estado, la bandera, el himno... Es impensable que los representantes de un partido en la mesa del Parlamento retiren la bandera de Portugal de sus despachos oficiales, como hicieron los de Podemos en España.

Felizmente no tenemos nacionalismos excluyentes y destructivos que no se sienten portugueses. Lo que acaba de decir el presidente del PNV "sentirnos españoles, ¡ni por el forro!", en Portugal es inconcebible. En mi país, todos los partidos quieren mejorar el sistema, pero no son partidos "populistas", ni antisistema. Un partido nuevo que se "avergüenza" del nombre de Portugal y lo sustituye por "Más País" tendría muy malos resultados electorales.

Tenemos unidad de mercado y fiscal. Azores y Madeira son gobiernos autónomos, pero es impensable que sus mandatarios declaren la independencia, convoquen a desobedecer las leyes, alienten revueltas, eduquen en el odio a Portugal o denigren su democracia, como hacen el Gobierno y los independentistas en Cataluña. Serían castigados severamente por la ley.

En general, los políticos son honestos y los implicados en casos de corrupción desaparecen de la política. Igual que el que plagia la tesis u obtiene un título académico fraudulentamente".

Con el último café apostilló: "Que los señores Rivera y Sánchez hablen ahora de pactos para después del 10-N cuando rehuyeron el acuerdo que les daba mayoría absoluta holgada refleja la poca madurez política y la nula responsabilidad institucional de ambos".

Así ve este analista la complicada realidad de una España diferente que, según él, explica los comportamientos tan distintos de políticos españoles y portugueses.

Una nota final: La conversación tuvo lugar el sábado 12, antes de la sentencia del Supremo y de las alteraciones del orden en Cataluña. Su análisis sería ahora más duro y el diagnóstico más grave.

Comentarios