El entrenador del Lugo, Eloy Jiménez, celebró el triunfo logrado en el Carlos Belmonte ante el Albacete, el primero fuera de casa como preparador del cuadro lucense, gracias al "buen trabajo" de sus "chicos", lo que le permite al club sacar distancia con la zona baja.
"Aprovechamos nuestra oportunidad para ganar a un gran equipo", afirmó Jiménez, quien añadió que: "necesitábamos la victoria para ganar por fin dos partidos seguidos. Me alegro mucho por los chicos, porque se lo merecían por su gran trabajo. Ahora tenemos que pensar ya en el siguiente partido".
"El Albacete era un rival muy complicado y por eso me voy muy contento, por haber logrado un triunfo muy importante y porque los chicos tuvieron la recompensa a su buen trabajo", puntualizó. Asimismo, Jiménez afirmó que decidió sustituir a Seoane por Álex López por la tarjeta del futbolista de Ames y celebró el fútbol creado por Jaume Grau desde su salida en el segundo acto. "Seoane tenía tarjeta y no podíamos quedarnos con diez. Álex (López) nos dio mucho juego por dentro, al igual que Jaume, que trabaja siempre muy bien, tiene un buen recorrido de ida y vuelta y aportó control en el centro del campo. Los cambios salieron muy bien y eso nos permitió ganar", declaró el preparador manchego.
Jiménez restó importancia a las ausencias en la banda derecha, porque "el Albacete también tenía bajas". "En la derecha estábamos los justos con Campabadal o Iriome. En nuestro equipo el que sale siempre tiene gran nivel y lo hace igual de bien que sus compañeros", valoró. Por último, el de Hellín deseó un buen resultado ante el Rácing de Santander el próximo domingo (18.30) porque "hay que hacerse muy fuertes en nuestra casa".
"En la jugada del gol vi cómo Cristian salió del regate, que varios compañeros fueron a zonas de remate y me dejaron un espacio libre al que pude llegar. Cristian me la puso perfecta y no sé ni cómo le pegué, creo que de interior o de empeine, pero valió para meterla dentro", relató. Sobre el partido, el futbolista cedido por el Espanyol indicó: "El Albacete apretó mucho, pero nosotros pudimos coger esa contra para marcar y venirnos con los tres puntos".
"En la primera parte el césped se levantaba mucho, estaba muy mal, pero nos pudimos adaptar bien", aseguró. Respecto a su situación personal, afirmó estar "tranquilo" y con la "cabeza muy fuerte" para "aprovechar lo que me den", porque confía "mucho" en sí mismo. "Todos queremos jugar más, pero nosotros tenemos que trabajar y que sea el míster el que luego decida", puntualizó.