El vertedero de inertes de Monforte será sellado

El vertedero de residuos inertes de la construcción de Monforte, donde se depositan los restos del derribo de una casa o el material que sobra al edificar una nueva, está al límite de su capacidad, según declararon desde el equipo de gobierno local. Creado por la Xunta de Galicia hace catorce años en terrenos de la extinta cerámica O Castelo, será cerrado en breve al no resultar posible que reciba más desperdicios.

Su sellado se realizará con los fondos recaudados a lo largo de los años por el cobro del depósito de escombros.

El Ayuntamiento tiene previsto dirigirse al Ejecutivo gallego para buscar una solución a este problema, que pasaría por la apertura de otro similar en algún punto del municipio, esperándose contar para ello con la colaboración de la Consellería de Medio Ambiente.

Punto verde
En el polígono industrial de O Reboredo se trabaja en la adecuación de un espacio para crear un centro de tratamiento de residuos industriales. Según el Ayuntamiento, podría estar listo para el mes de marzo

La infraestructura, denominada punto verde, acogerá los restos no peligrosos tales como madera, palés, cartón, telas, vidrio, cenizas limpias y residuos electrónicos de las empresas de todo el sur lucense.

Gracias a este centro, los empresarios verán reducidos los costes de transporte de estos vertidos, ya que la planta centralizará la acumulación y gestión de los mismos en una única instalación.

El espacio había sido promovido por la Consellería de Medio Ambiente e Desenvolvemento Sostible del gobierno bipartito de la anterior Xunta, que financió íntegramente esta instalación con un presupuesto de 539.649 euros.

Los empresarios monfortinos llevaban años reclamando la ejecución de este proyecto. Los primeros contactos con los responsables de la Xunta se remontan al comienzo del mandato municipal comprendido entre los años 2003 y 2007.

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