El último molinero del Mao

Manuel Ledo Rodríguez. A punto de cumplir 89 años, este monfortino acude todos los días a un molino centenario ubicado en la parroquia de Valverde para convertir en harina los sacos de trigo que le llevan vecinos de la comarca. En cada jornada produce más de 30 kilos.

hARINA y madera, dos elementos cotidianos de la vida diaria, confieren al lugar un olor característico. Es como si alguien hubiese hecho pan en un alpendre edificado a comienzos del siglo XX. El viento, que circula a la par de las aguas del río Mao que fluyen bajo el molino, apenas puede disimular que Manuel Ledo Rodríguez está moliendo trigo. A la puerta le esperan dos vecinos bajo unas vigas convertidas en templo de cientos de arañas que han tejido su red. Ellos, como muchos otros de la parroquia de Valverde, en Monforte, acuden cada semana al lugar para convertir en harina el cereal cultivado durante el año. Ese, según dice, es el motivo principal por el que cada día se desplaza hasta su viejo artilugio de más de cien años: para seguir en contacto con las gentes que le han visto crecer.

Consiga AQUÍ la información completa

Comentarios