La guardería del campus seguirá cerrada una temporada más, después de cerca de ocho años acabada y sin haberle dado uso. El Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), que la Xunta aprobó parcialmente la semana pasada, da cobertura legal a este edificio, situado en la vaguada del campus, pero el tiempo que ha pasado desde que se proyectó ha hecho que las instalaciones se quedaran obsoletas y no se adapten ya a la normativa que regía cuando se construyó.
Por esta razón, la Vicepresidencia Primera de la Diputación de Lugo, de la que depende el edificio, señaló que esperará primero a que se publique oficialmente la aprobación del PXOM y después encargará un estudio para valorar cuánto cuesta modificarlo y adaptarlo a las nuevas normas. También se considerará si debe destinarse a la misma función que se le había asignado originalmente, ya que, según fuentes de este departamento, habrá que ver si existe la misma necesidad de plazas en esta zona que entonces.
La guardería fue uno de los temas que se trataron en una reunión que la candidatura del PSOE mantuvo ayer con miembros de la comunidad universitaria. José López Orozco señaló que le gustaría que quedara constancia de que el Concello «sempre fixo todo o posible por legalizar a obra pero non foi posible», a pesar de que hubo múltiples reuniones. Aseguró que con este edificio se actuó igual que con el resto en el campus, y no se cobró licencia de edificación.
La construcción de la guardería fue acordada en un convenio firmado por las consellerías de Familia y Política Territorial, la Diputación y la USC en 2001, cuando Francisco Cacharro Pardo estaba al frente del organismo provincial. Las obras acabaron en 2003, y entonces empezaron los choques entre el Concello y la Diputación por la licencia de apertura.
La institución provincial solicitó permiso y el Ayuntamiento no contestó, por lo que la Diputación entendió que el silencio administrativo era favorable a sus peticiones, pero la junta de gobierno municipal rechazó tal idea en octubre de 2006.
La Diputación recurrió y el juzgado de lo contencioso administrativo de Lugo le dio la razón al Ayuntamiento, que sostenía que la zona estaba afectada por la suspensión de licencias al iniciarse el trámite del PXOM.
A falta de este servicio, la Universidade de Santiago inició este mismo año la convocatoria de 25 bonos guardería para los hijos de miembros de la comunidad universitaria, cuya renovación tratará precisamente el próximo Consello de Goberno.
CONCELLO
- Pendientes de abrir otros dos centros. La capital lucense estrenará en breve otros dos centros de educación infantil, construidos por el Concello con ayudas estatales y ubicados en el barrio de A Piringalla y en el polígono Sur-K de Sanfiz. Con la apertura de estas dos guarderías, la ciudad contará con 122 nuevas plazas de educación infantil públicas -55 en A Piringalla y 61 en Sanfiz-, que sumadas a las existentes en los otros dos centros municipales supondrán un total de 238 plazas.
