La pelea entre el gobierno local y el principal grupo de la oposición a cuento de la deuda municipal continúa. Un día después de que la edil de economía, Sonia Méndez, criticara la gestión de los populares en los años 90, por dejar una deuda de 45 millones de euros que el equipo de José López Orozco logró reducir a 41, el PP echó cuentas y avanzó que el Concello tendrá que devolver 81 millones de euros en los próximos 45 años.
El portavoz popular, Jaime Castiñeira, insistió en que la deuda con los bancos asciende a 45 millones, frente a los 41 que señala el gobierno local, pero, además, a esa cifra añadió los 30 millones de euros que el Concello tendrá que aportar a Acuanorte en 45 años -ése fue el acuerdo- como parte de su colaboración en la construcción de la potabilizadora. El PP sumó también el dinero que tendrá que devolver al Estado fruto del mal cálculo que hizo éste, ya que la caída de sus ingresos fue mayor de lo previsto. El Concello lucense tendrá que devolver 1,8 millones correspondientes al 2008, y la liquidación de 2009 amenaza con ser todavía peor.
Así las cosas, mientras el gobierno sostiene que la situación económica del Concello es buena, el PP cree que en realidad es muy delicada.
