El obispado de Lugo planea crear un centro sobre el románico en el palacio de Diomondi

Las denuncias de los vecinos de O Saviñao lograron salvar de la ruina el palacio episcopal de Diomondi, ubicado al lado de la iglesia en honor a San Paio, y la Diócesis se Lugo se plantea crear en el monumento un centro de interpretación del románico.

El pasado mes de diciembre las alarmas saltaban en O Saviñao después de que el palacio episcopal de Diomondi, ubicado al lado de la iglesia en honor a San Paio, se derrumbase. Las paredes de la fachada principal del pazo acabaron en el suelo a causa de su deterioro, de las lluvias y las filtraciones y, los vecinos y diferentes colectivos reclamaron el arreglo inmediato del inmueble y su puesta en valor.

Tras el desplome, los hechos relacionados con Diomondi se desarrollaron en dos frentes: por un lado, se urgió una actuación para que no se perdiese la construcción y, por otro lado, la asociación Adega denunció ante del Valedor do Pobo la gestión del monumento por parte de la Xunta.

Las reclamaciones de los saviñádigos y de muchas otras voces del toda la Ribeira Sacra surtieron efecto y en el mes de febrero se dieron órdenes desde el obispado de Lugo de apuntalar las ruinas del palacio y evitar que el derrumbe avanzase y se pusiese también en peligro la iglesia de San Paio, uno de los templos románicos de más valor de la Ribeira Sacra.

Pero, además, el delegado de patrimonio histórico y cultural de la diócesis, César Carnero, hizo público el encargo de un proyecto para regenerar el edificio y convertirlo en un centro de interpretación del románico, además de la puesta en marcha de un estudio sobre el estado de la iglesia de San Paio y una valoración sobre una futura restauración del templo.

El centro serviría para explicar a los visitantes las características del románico en la Ribeira Sacra, reseñar todos los monumentos de la zona de ese estilo y avanzar en estudios sobre el mismo.

Los vecinos consiguieron que la población en general y los órganos implicados pusiesen sus ojos en el templo y apostasen por su recuperación, sin embargo, la otra batalla, la de las denuncias de Adega no llegó a más.

La oficina del Valedor do Pobo archivó hace poco más de un mes la queja del colectivo ecologista en la que se acusaba a la Xunta de negligencia respecto a los derrumbes. Tras un tiempo de investigaciones del Valedor llegó a la conclusión de que el mantenimiento y reparación del edificio correspondía a su propietario, la Diócesis de Lugo, y que la obra efectuada en 2005 por parte de la Consellería de Cultura en la cubierta había sido eficiente y permitiera retrasar el deterioro.

En su expediente, el Valedor do Pobo indicaba que es responsabilidad de la diócesis mantener en perfecto estado los bienes y realizar las labores de mantenimiento necesarias en edificios que están deshabitados.

No obstante, constataba que ya se iniciaran labores preventivas por parte de la Diócesis para preservar los restos de la fachada y que se encargó un proyecto para la recuperación integral del edificio para uso público.

Un espacio para los peregrinos

El edificio del palacio de Diomondi, construido entre los siglos XIII y XVI y contiguo a la iglesia románica de San Paio, es una amalgama de elementos arquitectónicos de varias épocas y fue residencia de verano de los obispos lucenses. Hace unas décadas dejó de servir de casa rectoral y desde entonces no ha tenido ningún uso, lo que precipitó su deterioro.

Albergue

Los redactores del anteproyecto de la recuperación integral del palacio y su conversión en centro de interpretación estudiarán también la posibilidad de habilitar en una parte del inmueble un pequeño albergue para acoger peregrinos, algo que propuso la asociación Camiño de Inverno ya que Diomondi está situado en plena ruta de peregrinación a Santiago.

Manifestaciones

Tras el derrumbe de la fachada del pazo, numerosas asociaciones y vecinos anónimos se concentraron ante el monumento para reclamar su reparación y el destino de fondos a tareas patrimoniales.

Comentarios