El delegado del Ine dice que la compra del Portela se decidió en Madrid

La instrucción del caso Garañón prosiguió este miércoles, centrada en la compra del sanatorio Portela como nueva sede del Instituto Nacional de Estadística (Ine). Una decisión que, según declaró el delegado del Ine en Lugo, José Manuel Colmenero, se tomó en Madrid por parte de los máximos responsables de este organismo, dependiente del Ministerio de Economía.

Colmenero fue citado como testigo en este asunto, en el que se investigan las supuestas irregularidades cometidas en el proceso de concesión de licencias para la urbanización de O Garañón, en las cuestas del Parque, sospechas que la jueza instructora, Pilar de Lara, extendió luego a toda la zona. En este sentido, considera que pudo existir delito en la compra por parte del Ine del sanatorio Portela, por el que pagó 1,8 millones de euros cuando unas semanas antes se había vendido por 400.000 euros menos.

La declaración de Colmenero, según informaron a este diario fuentes conocedoras del asunto, no aportó demasiada luz a la materia de investigación. El delegado se limitó a explicar los problemas de espacio que el Ine tenía en sus sedes en la ciudad y la necesidad de espacio. En estas circunstancias, el sanatorio Portela se ajustaba a lo que estaban buscando. Sin embargo, indicó que su papel en el proceso se limitó a enviar a Madrid los informes que le solicitaban, y que fue allí donde se decidió todo, sin poder aclarar quién fue el responsable último.

También detalló que el estallido de la crisis les dejó sin presupuesto para acometer las reformas necesarias, presupuestadas en más de dos millones de euros, y que estas obras se han retomado en la actualidad porque ya había dinero disponible.

ASOCIACIÓN. Por otro lado, pero también en relación al caso Garañón, la Asociación de Defensa del Parque, que ejerce la acusación particular, informó ayer de que ha presentado un recurso contra la decisión de la Audiencia Provincial de negarle su personación en la petición que presentaron los abogados de José Ramón Gómez Besteiro para que la jueza Pilar de Lara fuera apartada del caso.

Esta petición ya fue rechazada por la propia Audiencia hace semanas, y se tomó después de que uno de los jueces de la Sección Penal se inhibiera por su amistad con el líder del PSdeG. La asociación considera que dicho juez debería haberse inhibido antes, en 2011.