El largo proceso iniciado por distintas administraciones y colectivos civiles para conseguir el uso público del castillo de Pambre acaba de dar un nuevo giro al pasar la fortaleza a ser propiedad de una congregación religiosa, según confirmó este martes el Ayuntamiento palense, que espera llegar a un acuerdo con los nuevos dueños para conseguir que el castillo "pase de inmediato a manos públicas".
Según indicó el teniente de alcalde, Pablo Taboada, el conde de Borraxeiros —anterior propietario de la edificación medieval, recientemente fallecido— donó el castillo a la orden religiosa Hermanos Misioneros de los Enfermos Pobres, con sede en Vigo. Esta congregación será ahora la nueva interlocutora del Ayuntamiento y de la Xunta para lograr la apertura de la fortaleza al menos cuatro días al mes, tal como obliga la legislación para los Bienes de Interés Cultural (BIC), una normativa reiteradamente incumplida por el anterior dueño.
"Esto cambia mucho la situación porque hasta ahora nos fue imposible llegar a un acuerdo negociado e incluso la Xunta tuvo que abrir un expediente sancionador", recordó Pablo Taboada.
Tras apelar a la prudencia hasta saber con detalle los planes de la congregación religiosa, con la que el gobierno local espera sentarse a hablar en los próximos días, Pablo Taboada subrayó que, ante este nuevo escenario, "la prioridad del Ayuntamiento en los próximos meses será que el castillo de Pambre pase a ser público y esté a disposición de los vecinos".
Por su parte, el alcalde palense, Fernando Pensado, insistió este martes, en referencia a la postura que adoptará la Administración autonómica sobre la fortaleza medieval, en que "el presidente de la Xunta y el conselleiro de Cultura me dijeron que estarán a nuestro lado en todas las iniciativas del Ayuntamiento para que el castillo deje de estar en manos privadas". "Mientras tanto, ellos y el Ayuntamiento trabajarán para que Pambre se abra cuanto antes a las visitas", añadió.
Pensado se mostró esperanzado en que este proceso culmine de forma positiva, y para ello espera recabar el apoyo de las distintas administraciones. "Queremos que el castillo de Pambre sea de los vecinos de Palas, de Galicia y de España", recalcó el regidor, tras lo que se felicitó de que también esté "involucrada" en este proyecto la sociedad civil a través de distintas asociaciones ulloanas.
