La relación que Diana Quer mantenía con sus padres sigue siendo un misterio cuatro semanas después de su desaparición en A Pobra. Este martes El Programa de Ana Rosa ha hecho pública una inquietante conversación que la joven mantuvo con el hermano de su madre por Whatsapp mientras realizaba un viaje a Ibiza con su padre y su hermana.
"No puedo más. Quiero irme a casa", escribió Diana angustiada. "Estoy escondida. Me está dando un ataque de ansiedad", le dijo, mientras su tío intentaba tranquilizarla. La joven incluso acusó a Juan Carlos Quer de agredirla. "Mi padre me ha agarrado del brazo. Me ha hecho mucho daño. Están todos mal de la cabeza", aseguró.
El tío de las jóvenes pregunta a Diana si quiere que la llame, pero ella le dice que no puede hablar. "No me llames que me escuchan. Dile a mi madre que no me llame. Ni a mí ni a Valeria. Hoy no voy a estar sola. Nos vamos metidos en el barco a San Antonio". El agobio de Diana era tal que incluso contó a su tío que se "provocó el vómito en el desayuno".
La joven estaba preocupada por el estado en el que se encontraba su madre. Su tío le confiesa que está "triste". "Normal que esté triste por lo de Valeria. Yo he montado el número", responde Diana.
INVESTIGACIÓN. Los investigadores mantienen abiertas distintas actuaciones en relación a la desaparición de la joven y están "a la espera de nuevas pruebas que se puedan aportar" derivadas del análisis de señales de móviles, vehículos y matrículas y testimonios recogidos.
Así lo ha confirmado este martes en Santiago el delegado del Gobierno, Santiago Villanueva, en declaraciones a los medios, tras participar en un desayuno informativo. Tras recordar la decisión del juzgado que dirige las investigaciones de prorrogar durante un mes más el secreto de las actuaciones, Villanueva ha precisado que "siguen las investigaciones" sobre el caso y se está "a la espera de la concreción de las pruebas" realizadas por la Guardia Civil.
"Se hicieron muchas actuaciones y se van a seguir haciendo, tanto en los lugares 'in situ' como por temas telefónicos y con entrevistas que ratifican o contradicen las declaraciones anteriores", ha dicho el delegado del Gobierno, que ha apuntado que los investigadores están también "a la espera de nuevas pruebas que se puedan aportar".
Santiago Villanueva ha defendido el trabajo realizado por la Guardia Civil, con "equipos reforzados" desde Madrid, que analiza distintas líneas, como la localización del móvil de la joven el día de su desaparición, el pasado 22 de agosto, el posicionamiento de "otros móviles en la zona", el análisis de matrículas y vehículos, los posibles testigos y entrevistas con su entorno de amistades y familia.
Tras desear que el caso se resuelva "de una forma positiva", Villanueva ha garantizado que los investigadores mantienen "todas las vías abiertas" y que, por el momento, no hay una hipótesis "preferente" sobre la desaparición de la joven, de 18 años.
