La muerte de la actriz Marisa Porcel a los 74 años ha causado un profundo pesar en el sector de la televisión y la interpretación.
Conocida por su papel de Pepa en Escenas de Matrimonio, el nombre de la intérprete saltó a los titulares el pasado mes de junio por sus problemas con Hacienda.
Y es que la actriz tenía una deuda con la Agencia Tributaria de 1,4 millones de euros, a la que tendría que hacer frente su única hija, Paloma Porcel, si acepta la herencia de la artista.