Cuando la acera tropieza con un edificio

El PP pide un plan para eliminar tapones urbanísticos en el que se fijen prioridades y consignación económica, ya que algunos están en zonas muy transitadas por niños o de mucho tráfico
Camiño de Friás. EP
photo_camera Camiño de Friás. EP

El PP defenderá en el próximo pleno una moción para que el Concello elabore un plan de supresión de tapones urbanísticos, en el que se establezcan prioridades y partidas económicas.

Los populares hicieron "un chequeo" a la ciudad y señalaron cerca de una decena de puntos donde o bien la acera acaba en un edificio o ni siquiera hay acera y la construcción se mete de lleno en la calzada. Algunos de estos "atrancos en vía pública" están en lugares de mucho tráfico, en zonas por la que transitan muchos peatones o en puntos donde se dan ambas circunstancias.

El viceportavoz del PP, Antonio Ameijide, se refirió, por ejemplo, a Camiño de Pipín, en A Milagrosa. Existe un tapón justo al lado del colegio Cervantes, donde estudian varios cientos de niños, y de un paso de peatones. Son dos construcciones y al menos una de ellas está tapiada y por tanto deshabitada, lo que debería hacer más fácil actuar, opina. En todo caso, mientras la situación urbanística no se corrige, el PP propone, como ya hizo en otras ocasiones, que se cree un itinerario peatonal seguro, con bolardos y elevación del paso de peatones.

MONTIRÓN. Rof Codina es otra calle donde la oposición considera urgente continuar actuando. Recuerda que hace unos años se construyó un trozo de acera, pero unos metros más adelante los peatones tienen que seguir saliendo a la calzada. En esa calle hay una escuela infantil y un centro de día de atención a personas mayores. Asimismo, en la Rúa San Xillao, que comunica As Fontiñas con Rei Don García, hay un estrechamiento de unos 170 metros de largo que linda con Aspnais.

Ameijide recuerda que desde 2015, el Concello solo suprimió un tapón, en la Avenida da Coruña cerca de Garabolos

El final de la Rúa Xosé Novo Freire es otro punto conflictivo porque hay tráfico en ambos sentidos, está al lado de una zona deportiva y es una calle que comunica el centro y el sur de la ciudad.

Otros tapones urbanísticos afectan más a la circulación de vehículos, por ser puntos con menos tránsito peatonal pero mucho tráfico. Es el caso del existente en Camiño de Friás, que comunica el Sagrado Corazón con Galegos y es una vía que utilizan usuarios y trabajadores del Hula.

En Carril das Hortas (entre As Fontiñas y San Roque), el mayor riesgo lo sufren los conductores que salen del garaje situado justo al lado del peatón y no tienen visión de los coches que suben, a veces a gran velocidad.

Los populares dicen ser conscientes de que en muchos casos la eliminación de estos tapones puede ser laboriosa y costosa, pero creen que es necesario planificar las actuaciones "porque se non seguiremos sufrindo esta situación moitos anos máis". En otros casos, no tendría por qué haber tanta dificultad, opinan, ya que son tramos de calle en los que no hay edificaciones e insta a negociar con los propietarios, que en realidad serían quienes tendrían que urbanizar en el momento en que construyan. Cita como ejemplo tramos de las calles Ramos Misioné y Mazaira.

Ameijide recuerda que desde 2015, el Concello solo suprimió un tapón, en la Avenida da Coruña cerca de Garabolos. Este puede ser un ejemplo de lo laboriosas que resultan esta actuaciones. Hubo que negociar con 16 propietarios de tres parcelas (alguno residente en otro continente).