Corea del Norte reconstruye una base de misiles y siembra dudas en torno al diálogo

Pionyang quiere mostrarse desafiante después de que EE UU rechazara en Hanói sus demandas para el levantamiento de sanciones

Imagen aérea que muestra la estación satélite de Sohae, el pasado sábado en Cholsan County, Corea del Norte. SATELLITE IMAGE ©2019 DIGITALGLOBE
photo_camera Imagen aérea que muestra la estación satélite de Sohae, el pasado sábado en Cholsan County, Corea del Norte. SATELLITE IMAGE ©2019 DIGITALGLOBE

Fotos por satélite mostraron este miércoles que Corea del Norte está reconstruyendo una base de misiles que había empezado a desmantelar en 2018, un gesto difícil de interpretar pero que podría indicar un desplante a EE UU tras el rechazo a sus demandas en la cumbre de Hánoi.

Las imágenes fueron obtenidas el pasado 2 de marzo, tres días después de que la cumbre concluyera sin acuerdo entre EE UU y Corea del Norte, y muestran que en la base de Sohae (noroeste del país) se han empezado a restaurar estructuras en la plataforma de lanzamiento y en el banco de prueba vertical para motores de misiles.

La web 38north, dependiente del centro de investigación Stimson, y el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS), ambos con sede en Washington, comprobaron en sus análisis que el banco de prueba ha sido parcialmente reconstruido y que a su alrededor se ven grúas, vehículos y suministros varios.

En la pista de lanzamiento se observa asimismo que la estructura para transportar proyectiles sobre raíles está siendo restituida.

Corea del Norte comenzó a desmantelar estas dos instalaciones clave de Sohae el pasado julio, después de la primera cumbre en Singapur entre el líder norcoreano, Kim Jong-un, y el presidente de EE UU, Donald Trump, lo que se interpretó como un gesto que mostraba la predisposición de Pionyang a avanzar hacia la desnuclearización. 

Se ignora la fecha exacta en la que comenzaron estas nuevas labores de reconstrucción, cuyo arranque 38north sitúa entre el 16 de febrero y el 2 de marzo a partir de las anteriores imágenes de Sohae tomadas por satélite.

Y ante todo se desconocen los motivos por los cuales el régimen ha apostado por restituir ahora unas instalaciones que no habían mostrado actividad desde el pasado agosto y cuyo peso dentro del programa de armas del régimen no parece, por otro lado, muy destacable.

Sohae es la principal base del llamado programa espacial norcoreano y ha sido escenario de cuatro importantes lanzamientos (uno de ellos fallido).

Tuvieron lugar en 2012 y 2016 y se llevaron a cabo para intentar poner en órbita varios satélites, algo que se consideró una excusa para probar tecnología de misiles balísticos intercontinentales (ICBM) y que la ONU acabó sancionando en consecuencia. 

Sin embargo, Corea del Norte lanzó sus primeros ICBM en 2017 sin emplear una plataforma fija de lanzamiento como la de Sohae, lo que plantea dudas sobre la utilidad de restaurar este armazón.

Sea cual sea su objetivo, los analistas del CSIS se atrevieron a apuntar que estas obras en Sohae podrían indicar que Corea del Norte quiere mostrarse desafiante -sugiriendo, por ejemplo, que podría empezar a testar misiles de nuevo- después de que EE UU rechazara en Hanói sus demandas para el levantamiento de sanciones.

Aunque Pionyang y Washington dan versiones diferentes, el desacuerdo en la cumbre giró en torno al número de activos del programa nuclear norcoreano a desmantelar y el volumen de sanciones internacionales sobre Pionyang a aliviar como contrapartida. 

Comentarios