Condenada por dejar a su hija menor a la intemperie en un alpendre sin luz

Tardó 6 años en ser juzgada y la niña, que ya es mayor de edad, estuvo una temporada tutelada
Edificio de los juzgados de Lugo, en la Praza de Avilés. SEBAS SENANDE
photo_camera Edificio de los juzgados de Lugo, en la Praza de Avilés. SEBAS SENANDE

El juzgado de lo Penal número 2 de Lugo impuso una condena de año y medio de prisión a una mujer acusada de un delito de violencia en el ámbito familiar por impedir a su hija de doce años entrar en el domicilio y obligarla a estar todos los días hasta las nueve de la noche en un alpendre, sin luz y a la intemperie. El juez le impuso también a la acusada la prohibición de aproximarse a la menor o comunicarse con ella por cualquier medio durante 18 meses, pero el fiscal recurrió el fallo al considerar que el alejamiento tenía que ser de tres años y la Audiencia Provincial le acaba de dar la razón.

Según quedó recogido en la sentencia, en el año 2014, la acusada le impidió a su hija en varias ocasiones que entrara en el domicilio familiar al llegar del colegio, sobre la cinco y media de la tarde. La mujer le cerraba la puerta y, "con ánimo de menoscabar su integridad psicológica y física", la obligaba a quedarse en un alpendre cercano a la casa, sin luz, y sin importarle que lloviera o que hiciese frío.

La acusada la mandaba a su hija quedarse en ese lugar hasta las ocho o las nueve de la noche, "situación que se repetía a diario", hasta que la niña contó lo que le sucedía y el 4 de diciembre de 2014 se acordó su tutela por parte de la Xunta de Galicia. Casi un año más tarde, el 21 de octubre de 2015, se alzó la tutela pública y la pequeña volvió a vivir con su madre.

Sin embargo, según mantuvo el ministerio fiscal, se volvió a producir la misma situación "en diversas ocasiones".

La mujer fue acusada de un delito de violencia familiar y el Penal número 2 la condenó el pasado enero a 18 meses de cárcel y el mismo periodo de alejamiento de su hija, pero el ministerio fiscal recurrió el fallo ante la Audiencia Provincial de Lugo. El tribunal acaba de dictar sentencia y mantuvo la pena de año y medio de prisión -que inicialmente no tendrá que cumplir, ya que carece de antecedentes-, pero elevó el alejamiento a tres años. La sentencia llega seis años después de los hechos que se condenan, cuando la víctima ya es mayor de edad.