El Concello salva con una oferta de Nadela la cuarta caseta del pulpo

Los hermanos Carballeira, de San Xoán de Pena, aspiran a entrar en el negocio de San Froilán, muy polémico en los últimos años

Casetas de pulpo en el ferial de San Froilán. AEP
photo_camera Casetas de pulpo en el ferial de San Froilán. AEP

Si nada se tuerce, el Concello ha conseguido que vuelva a haber cuatro casetas del pulpo el próximo San Froilán, después de que Aurora do Carballiño renunciara a una de las dos que le fueron adjudicadas y consiguiera que, a ultimísima hora, presentara una propuesta para instalarse el Restaurante Nadela, según confirmó su responsable, Nacho Carballeira, que está al frente del negocio junto a su hermano Marcos.

Tras la renuncia de la pulpeira de O Carballiño, el Concello sacó a concurso otra vez ese espacio. Las bases se publicaron en el perfil del contratante del Estado, como obliga la ley, aunque no en el del Concello de Lugo. El plazo para presentar ofertas terminó este miércoles y, a falta de que todavía pueda llegar alguna por correo postal, en el registro municipal solo se registró la de Restaurante Nadela.

Carballeira prefiere ser prudente y esperar al viernes, día en el que se abren las ofertas, para ver si tiene competencia y si su propuesta es aceptada por el Ayuntamiento, para dar detalles sobre la caseta que pretende instalar y sobre cómo prevé afrontar este nuevo reto, ya que este será su primer desembarco en el ferial de San Froilán.

La instalación de una caseta en las patronales de Lugo supone un gran desembolso económico y cierta experiencia en eventos grandes, requisito que cumple Nadela, que está especializado en banquetes en sus instalaciones de San Xoán de Pena y en caterings.

La experiencia en restauración es un requisito que el Concello introdujo este año, después de la polémica surgida en 2016, cuando un trabajador de banco sin vinculación con la hostelería se hizo con la mayor parte del negocio del pulpo y, pese a contar con la ayuda de una hostelera de Meira, tuvo muchas dificultades, primero para hacerse con las casetas y despúes para ofrecer el servicio. De hecho, ese primer año renunció a explotar una caseta y un caldero y después rechazó instalarse en los tres años que le quedaban por contrato.

Desde entonces, el negocio del pulpo no ha dejado de estar rodeado de polémica. Los pulperos tradicionales recuperaron el negocio el año pasado, pero este año forzaron el cambio de las bases alegando que, con el precio fijado por el Concello para la ración del pulpo, no podían afrontar el encarecimiento que el cefalópodo experimentó en el último año.

Además de Restaurante Nadela -si se confirma- y Aurora do Carballiño instalarán caseta La Palloza y Torre de Núñez.

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