El Concello licitará en la plaza de abastos y el mercado 26 puestos y acabará el sótano en 2020

Los espacios de venta se adjudicarán por 25 años y se valorará la experiencia, los servicios que ofrezcan a los clientes y el empleo que generen
Plaza de abastos de Lugo. AEP
photo_camera Plaza de abastos de Lugo. AEP

La concejalía de participación ciudadana y servicios generales ultima las bases para sacar a concurso 13 puestos de venta en la plaza de abastos y 13 en el mercado de Quiroga Ballesteros, muchos de los cuales llevan años vacíos o con el contrato caducado. Actualmente hay 35 y 20 puestos, respectivamente, ocupados en cada una de las instalaciones.

La concejala Cristina López también anunció que se reservará dinero en 2020 para acabar la obra del sótano, que quedó pendiente de la reforma de la plaza que se llevó a cabo en 2016. Será una obra de bastante envergadura porque en 2016 no se hizo mucho más que demoler las mesas de venta, que eran de piedra, y habilitar un paso subterráneo hasta el párking de Santo Domingo. Por esa razón, el área nacionalista del gobierno prevé llevarla a cabo al mismo tiempo que la peatonalización de la calle Quiroga Ballesteros.

La peatonalización ya dispone de presupuesto, tras la reciente aprobación de crédito por el pleno, pero está pendiente de licitar. La partida para el sótano irá en el presupuesto municipal de 2020, que el gobierno quiere tener listo para que entre en vigor el 1 de enero, y el proyecto se aproxima a los 400.000 euros, indicó López.

Respecto a los puestos que se sacarán a concurso, la concejala explicó que las bases están siendo revisadas por el servicio de contratación y que, en principio, la idea es valorar la experiencia en estos espacios. El objetivo es que aquellos comerciantes a quienes, en la última década, se les adjudicó el puesto por cuatro años y a los que, superado ese plazo, no se les dio la opción de legalizar su situación, puedan hacerlo ahora con alguna ventaja de partida.

Los placeros pagan al mes 13,18 euros por metro cuadrado, en el caso de los puestos fijos

A la hora de puntuar las propuestas que se reciban se valorará la actividad de que se trate -"loxicamente, non se axusta calquera actividade", apunta López-, los servicios que se ofrezcan a los clientes, la experiencia en la actividad para la que se solicite puesto y el número de empleos que generen, entre otros criterios. "Non se pedirá oferta económica", explicó la concejala, quien señaló que los puestos se ofrecerán con los precios que hay aprobados actualmente. El periodo de concesión será de 25 años. "Non é o mesmo facer un proxecto e un investimento pensando en ter que rendibilizalo en catro anos que ver que tes moito máis tempo por diante. E se a actividade non funciona, pódese renunciar ao posto sen penalización", explicó la concejala.

López dice que, en los pocos meses que lleva al frente del área de mercados, constató que hay emprendedores con interés en instalarse en los espacios de Quiroga Ballesteros, entre ellos, varios vinculados a servicios de hostelería. En la plaza hay actualmente dos cafeterías y en el mercado, dos restaurantes. Uno está en los soportales y otro en el interior, de pasta italiana que se elabora en otro puesto que también está situado en las instalaciones municipales. Hace años llegó a haber otro restaurante dentro del mercado, pero funcionó muy poco tiempo.

PRECIOS. Los placeros pagan al mes 13,18 euros por metro cuadrado, en el caso de los puestos fijos. A eso se suman 4,48 euros por metro cuadrado de cámara frigorífica y 2,40 euros metros por metro cuadrado de almacén. Las tasas del mercado tradicional -el que se celebra en el sótano- son de 1 euro por metro cuadrado y día y las del mercado de las flores, de 5,15 euros por metro cuadrado. Los precios son de 2017. Desde entonces no se revisaron y no está previsto que se haga a corto plazo, según asegura la concejala.

El mercado de Quiroga Ballesteros y la plaza de abastos fueron objeto de inversiones importantes en los últimos años. Sirvieron para modernizar la imagen de ambos espacios y los cambios no estuvieron exentos de algunas críticas, sobre todo de los placeros. Ahora el Concello pretende rematar la obra con el acondicionamiento del sótano, que obligará a desplazar el mercado de los martes y viernes a los soportales de Quiroga Ballesteros mientras duren los trabajos.